El secretario de energía de Estados Unidos, Rick Perry, planea dejar la administración de Trump, pero su salida no es inminente, dijo el miércoles una fuente familiarizada con la situación.
Perry, un exgobernador de Texas que ha asumido un papel destacado en la política del presidente Donald Trump de impulsar la producción de energía, ha estado finalizando su partida, dijo la fuente.
El plan de Perry fue reportado por primera vez por Bloomberg.
«No hay verdad de que el secretario Perry abandone la Administración en el corto plazo. Está contento de que está sirviendo al presidente Trump y dirigiendo el Departamento de Energía», dijo la portavoz del departamento Shaylyn Hynes.
