La Cámara baja de Estados Unidos aprobó el miércoles una prohibición sobre la importación y el tráfico de muñecas y robots sexuales con anatomía de niños que «normalizan el sexo entre los adultos y menores».
La propuesta fue aprobada en la Cámara y ahora se traslada al Senado.
«Estas muñecas se pueden programar para simular una violación. De solo pensarlo me da náuseas», dijo el presidente del Comité Judicial de la Cámara, Bob Goodlatte, un republicano de Virginia.
Las muñecas sexuales infantiles son un nicho en una incipiente industria del sexo con robots que ha generado un debate sobre la ética de usar máquinas con aspecto humano para actividades sexuales. Es un tema que para muchos pasa de la aprensión a la repugnancia total cuando se trata de muñecas sexuales y robots con anatomías infantiles.
«Una vez que un abusador se cansa de practicar con una muñeca, le queda muy poco para pasar a un niño. Mi proyecto de ley toma las medidas necesarias para evitar que estas muñecas repugnantes lleguen a nuestras comunidades «, dijo el representante Dan Donovan, un republicano de Nueva York que patrocinó la legislación.
Las muñecas sexuales de aspecto infantil se importan de China, Hong Kong y Japón, a menudo etiquetadas como maniquíes o modelos, para evitar el decomiso por parte de las autoridades. Ninguna ley actual en Estados Unidos prohíbe específicamente la importación y venta de muñecas sexuales.
Los robots sexuales son cada vez más reales, hechos de material de silicio similar a la carne, algunos con inteligencia artificial básica que permiten conversaciones basadas en estados de ánimo.
La propuesta dice que las muñecas y los robots obscenos «pueden parecerse a niños reales. Las muñecas y los robots normalizan la sumisión y normalizan el sexo entre adultos y menores”.
Goodlatte dijo que estaba «consternado» de que aún exista el problema de las muñecas sexuales para niños.
«Me entristece que haya personas en este mundo que fabriquen muñecas para el sexo que parezcan niños y me angustia que haya personas en este mundo que las compren», dijo Goodlatte.
Los robots sexuales más recientes para adultos, algunos fabricados en Estados Unidos, tienen expresiones faciales específicas y permiten conversaciones limitadas. Roxxxy, un prototipo de robot sexual de la marca True Companion, tiene personalidades programables, como «Wendy, la salvaje», «Martha, la madura» y «Farrah, la frígida».
En un artículo del Journal of Internet Law de diciembre pasado, dos investigadores describieron a «Farrah, la frígida» como la más desconcertante porque tiene una configuración en que la muñeca rechaza todas las propuestas y alienta al usuario a violarla.
Tim Johnson, 202 383-6028, @ timjohnson4
