La senadora demócrata Kamala Harris de California, una estrella emergente del partido y crítica abierta de las políticas de inmigración del presidente Donald Trump, lanzó el lunes su campaña para la Casa Blanca en 2010.
Harris, de 54 años y quien es hija de inmigrantes de Jamaica y la India, se suma a la lista temprana de candidatos de su partido que han mostrado su intención de competir por la presidencia de EE.UU.
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Su intención llega en momentos en que como candidata demócrata se acerca a la base cada vez más diversa del partido con votantes jóvenes, mujeres y minorías.
«Tengo la experiencia única de haber sido líder en el gobierno local, el gobierno estatal y el gobierno federal», dijo en Harris durante una aparición en Good Morning America de ABC.
Su anuncio se produce el día festivo en, en honor a Martin Luther King, líder de los derechos civiles en EE.UU..
«Somos mejor de lo que somos cuando luchamos para alcanzar estos ideales», dijo a ABC. «Tenemos defectos, no somos perfectos, pero somos un gran país cuando pensamos en los principios sobre los que nos fundamos», agregó.
Harris es exfiscal general del estado de California y ha alacanzado popularidad entre los activistas liberales por su duro interrogatorio acerca de los nombramientos de funcionarios en la administración del presidente Donald Trump, incluido el nombrado juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh y el ex fiscal general Jeff Sessions, durante las audiencias en el Senado.
Su campaña se centrará en reducir el alto costo de la vida con un crédito fiscal para la clase media, perseguir los cambios de inmigración y justicia penal y un sistema de salud de Medicare para todos. Ha dicho que rechazará el dinero del comité de acción política corporativa.
La campaña de Harris se basará en Baltimore, con una segunda oficina en Oakland, California y se basa en el lema: «Para la gente».
Se espera que realice su presentación de campaña en Oakland antes de fin de mes.
