Inicio EEUU El Pentágono sopesa destinar una segunda base militar a albergar migrantes

El Pentágono sopesa destinar una segunda base militar a albergar migrantes

El Departamento de Defensa de Estados Unidos está valorando una solicitud del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) para permitir que menores migrantes que entraron en el país de manera irregular sean albergados temporalmente en Camp Roberts, en California.

«Puedo confirmar que hemos recibido una solicitud de asistencia del HHS para la potencial utilización de Camp Roberts, en California, para acoger a menores no acompañados», desveló el jueves el portavoz del Pentágono, John Kirby, en conversación con periodistas.

El funcionario señaló que la cartera de Defensa está «avanzando en estos momentos en analizar la petición». Kirby, sin embargo, no quiso entrar en detalles específicos sobre la solicitud ni pudo confirmar a cuántos menores se les podría dar alojamiento allí.

Camp Roberts es una instalación de la Guardia Nacional, ubicado en los condados de Monterey y San Luis Obispo, en la franja central del estado de California.

Expertos piden medidas concretas para solventar la situación en la frontera sur de EE. UU.
La búsqueda de un consenso bipartidista sería un paso fundamental para que el Gobierno de EE. UU. haga frente a la actual situación inmigratoria, opinan los expertos. Representantes de ambos partidos visitaron la frontera sur la semana pasada.

El pasado 24 de marzo, el Pentágono anunció que había recibido una primera petición del HHS para poder emplear Fort Bliss, en Texas, como centro de acogida de migrantes.

En las últimas semanas se ha registrado un notable aumento de entradas irregulares a través de la frontera sur, especialmente por parte de menores no acompañados. Aunque la Administración Biden ha recalcado que la frontera permanece cerrada debido a la pandemia, ha subrayado que en el caso de menores se les permitirá permanecer en el país mientras se procesa su caso.

En febrero, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detuvo a más de 100.000 personas en la frontera, un incremento del 28% en comparación con enero. De ellas, 19.246 eran unidades familiares y casi 9.500 menores no acompañados, según datos del CBP.

Esta oleada, unida a las restricciones impuestas por la pandemia y, según el Gobierno, un sistema inmigratorio desmantelado por la Administración Trump, entre otras razones, ha provocado que la Casa Blanca tenga que buscar nuevas posibilidades de alojo para evitar las imágenes de hacinamiento que ya se han comenzado a producir.