El futuro embajador de EE.UU. ante el régimen de Israel, David Friedman, manifiesta su deseo de llevar a cabo su misión en ‘la capital de Israel, Jerusalén’.
«Pretendo trabajar sin descanso para reforzar los vínculos inmutables que unen a nuestros dos países y hacer que la paz avance en la región, y estoy impaciente por hacerlo desde la embajada estadounidense en la capital eterna de Israel, Jerusalén (Al-Quds)», escribió el miércoles Friedman, citado en un comunicado del equipo de Trump.
Washington, al igual que la mayor parte de la comunidad internacional, no reconoce a Jerusalén como la capital del régimen de Israel y mantiene su embajada en Tel Aviv (territorios ocupados).
Pretendo trabajar sin descanso para reforzar los vínculos inmutables que unen a nuestros dos países y hacer que la paz avance en la región, y estoy impaciente por hacerlo desde le embajada estadounidense en la capital eterna de Israel, Jerusalén (Al-Quds)», escribió en un comunicado el futuro embajador de EE.UU. ante el régimen de Israel, David Friedman.
«Como embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman mantendrá la relación especial» que nos une, señaló Donald Trump en el comunicado, sin hacer mención al emplazamiento de la embajada.
Friedman, uno de los principales asesores de Trump en la campaña electoral, fue designado el jueves por Trump como embajador estadounidense ante el régimen de Israel.
En octubre pasado, el diplomático estadounidense manifestó su apoyo a los asentamientos israelíes construidos en la ocupada Cisjordania diciendo que no son “ilegales”.
Friedman también se ha mostrado partidario de que las desavenencias entre Washington y el régimen de Tel Aviv se resuelvan en privado a fin de no dar alas a los enemigos de EE.UU. e Israel, como lo ha hecho hasta ahora la saliente Administración de Barack Obama.
El 25 de septiembre, el entonces candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, prometió al primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, que en el caso de ser electo presidente, reconocería a Al-Quds (Jerusalén) como la capital israelí.
En marzo, también aseguró que de ser elegido presidente de Estados Unidos, movería la embajada de su país de Tel Aviv a Al-Quds. Recientemente, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha advertido de la necesidad de tomar “medidas urgentes” para “evitar una realidad de un solo estado con ocupación y conflicto perpetuos” para palestinos e israelíes.
El régimen israelí alega que Al-Quds es su capital, no obstante, pocos países lo aceptan, y la mayoría de las naciones mantienen sus embajadas en Tel Aviv. En caso de que se ejecute la propuesta de Trump, la política de Washington sobre el tema palestino-israelí registraría un giro significativo.
mep/ktg/nal
