El fiscal especial que supervisa la investigación de la interferencia rusa en las elecciones de 2016, está entrevistando a funcionarios de alto rango del gobierno como parte de una ampliación del caso que ahora incluye una averiguación de si el presidente Donald Trump intentó obstruir la justicia, informa el Washington Post.
La decisión del fiscal especial Robert Mueller de investigar la conducta de Trump es un momento crucial en la investigación que comenzó el FBI hace casi un año y que hasta hace poco se enfocaba en la interferencia rusa durante la campaña presidencial y si hubo alguna coordinación entre la campaña de Trump y el Kremlim.
Los investigadores también han estado averiguando posibles delitos financieros entre los asociados de Trump, dijeron funcionarios al Washington Post.
El destituido director del FBI James Comey, había asegurado en enero al Presidente que él no estaba personalmente bajo investigación, pero, los funcionarios que proveyeron la información al diario, indicaron que eso cambió luego del despido de Comey.
Según la información del periódico capitalino, cinco personas familiarizadas con el asunto, que hablaron bajo la condición de no ser identificadas porque no estan autorizadas a hablar públicamente sobre el tema, dijeron que el director nacional de inteligencia Daniel Coats; el jefe de la agencia de seguridad nacional (NSA), Mike Rogers, y el segundo de Roger, Richard Ledgett, quien hace poco dejó el gobierno, aceptaron ser entrevistados por los investigadores de Mueller esta semana.
Se desconoce, dice el artículo, cuántas personas más han sido entrevistadas por el FBI.
Un comunicado de la NSA, citado por el Washington Post, dice que la agencia «cooperará totalmente con el fiscal especial», pero no da detalles. El despacho del Director Nacional de Inteligencia y Ledgett, tampoco quisieron hacer declaraciones, indica el diario.
