Inicio EEUU Iván Duque: «Un deber moral» acabar con la dictadura en Venezuela

Iván Duque: «Un deber moral» acabar con la dictadura en Venezuela

La crisis venezolana siguió dominando la visita a Estados Unidos del presidente de Colombia, Iván Duque, en su segundo día en Washington.

Duque, dedicó buena parte de su agenda, el jueves, a la cuestión económica. Recorrió diferentes organismos financieros como la Cámara de Comercio estadounidense, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), donde habló, principalmente, de Venezuela.

“Ver que un país cae prisionero de una dictadura que aniquila los poderes, la iniciativa privada, la prensa independiente, la persecución de la oposición, los crímenes sistemáticos, y seguir manteniendo un lenguaje diplomático, donde las cosas se miran de lejos, a mí me parece que termina es validando o generando una complicidad con ese régimen”, dijo el mandatario colombiano en el BID.

Duque pidió tomar acciones contra quien considera responsables del colapso de Venezuela.

“Es el deber moral que tenemos todos, acabar con esa dictadura en Venezuela, es el compromiso que debemos tener todos porque no hacerlo es condenar a Venezuela al fracaso”, apuntó.

En un foro organizado por varios centros de pensamiento, entre ellos el Diálogo Interamericano y el Woodrow Wilson Center, Duque dijo que cree que Maduro debe ser juzgado y condenado por los crímenes que ha cometido. Y señaló, que aunque la amnistía no es una opción, considera que Maduro debe pagar por sus crímenes y ser juzgado en la Corte Penal Internacional, donde ya hay abierta una investigación en su contra.

En respuesta a una pregunta sobre si respaldaría el asilo de Maduro en Rusia, Duque dijo que aplaudiría que Maduro se vaya de Venezuela, pero en cuanto a Rusia no lo aplaudiría porque Moscú no reconoce la jurisdicción de la CPI.

En cuanto a la salida de la crisis, el presidente colombiano insistió en el cerco diplomático a Maduro y su entorno.

“Hoy tenemos el más grande cerco diplomático que se haya visto en este hemisferio donde no solo están los principales países de este hemisferio sino también, recientemente, la Unión Europea que está acorralando a un dictador y validando la legitimidad de un presidente como Juan Guaidó”.

Iván Duque dice esperar ahora que se produzca un efecto dominó que haga que la Fuerza Armada venezolana deje de apoyar al presidente en disputa, Nicolás Maduro.

De momento, países como Cuba, Nicaragua, China o Rusia desconocen la figura de Juan Guaidó y siguen considerando a Maduro como el mandatario legítimo de Venezuela.

El presidente dijo que el papel de China en América Latina sería más fuerte si el país asiático reconociera al líder opositor venezolano Juan Guaidó como el presidente interino.

«Realmente recomendaría a China que tome esa decisión», dijo Duque.

Duque también se reunió el jueves con el senador republicano por Florida, Marco Rubio, uno de los principales impulsores en el Congreso estadounidense de los esfuerzos contra el disputado gobierno de Nicolás Maduro. Rubio, publicó en Twitter fotos de su encuentro con el mandatario colombiano.

El mensaje dice: «Reunión productiva con mi amigo el presidente de #Colombia @IvanDuque y miembros de su gabinete. Estados Unidos sigue comprometido con nuestra fuerte alianza, apoyando la democracia en la región y combatiendo a los narcoterroristas».

El presidente de Colombia también promovió la inversión en su país, destacando el excelente momento económico que vive su nación y prometiendo incentivos y habló sobre políticas de seguridad, y lucha contra el terrorismo y narcotráfico con los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de EE.UU.

En su cuenta de Twitter, Duque registró las reuniones de su segundo día en la capital estadounidense.

En Caracas, Maduro invitó a un enviado especial de Estados Unidos para que venga a Venezuela luego de revelar en una entrevista a AP que su ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza, celebró recientemente reuniones secretas con el funcionario de Estados Unidos en Nueva York.

La segunda de las dos reuniones tuvo lugar cuatro días después de que el enviado, Elliott Abrams, dijo que ya había pasado el momento del diálogo con el gobierno de Maduro.