Los tragos suelen cobrar factura. De eso puede dar fe una adolescente estadounidense que seguramente nunca olvidará su última borrachera.
Kaitlyn Strom, de 19 años, asistió el viernes pasado al festival de música country en Winsted, Minessota, y se pasó de tragos.
Pero lo que nunca olvidará es que su cabeza quedó atorada durante más de media hora en el tubo de escape de un carro.
“Nos estábamos divirtiendo y vi este tubo de escape grande y pensé: «Mi cabeza puede que quepa allí, entonces lo intenté y sí cupo, pero luego no quería volver a salir», dijo la joven al portal Hutchinson Leader.
Sin entender qué pasaba, la Strom aseguró que intentó mantener la calma esperanzada en que alguien lograra sacarla.
Pasaron casi 45 minutos para que un bombero de Winsted lograra cortar el tubo de escape y desatorar la cabeza de la adolescente.
El bochornoso momento no solo fue presenciado por decenas de personas que asistieron al festival, sino ha sido reproducido en Internet por miles de personas que han visto el clip de cinco segundos que subió el usuario Billy Little en Facebook.
En el corto se ve a la joven con su cabeza atorada en el tubo de escape mientras un bombero de la ciudad intenta ayudarla.
«Sí, yo soy la chica del tubo de escape», bromeó la joven en su perfil de Facebook en una fotografía junto a Tom Wold, dueño de la camioneta.
«Recuerdo haberme desatorado y excusarme con él. ‘No te preocupes, me alegra que estés bien’, me dijo él», añadió la joven al Hutchinson Leader.
El video había sido reproducido hasta este miércoles más de 3 millones de veces.
