Inicio EEUU Le propuso matrimonio pero tenía un motivo monstruoso

Le propuso matrimonio pero tenía un motivo monstruoso

Si es testigo de un crimen, siga estos pasos

Presenciar un crimen y reportarlo puede ser tan traumático como ser la víctima de cualquier crimen. Siga estos pasos si es testigo de una actividad ilegal.

Presenciar un crimen y reportarlo puede ser tan traumático como ser la víctima de cualquier crimen. Siga estos pasos si es testigo de una actividad ilegal.

Un hombre conoció a una mujer en un sitio de citas en internet, pero en realidad estaba interesado en la hija de 9 años de ella y le preguntó si le permitiría tener relaciones sexuales con la menor. La madre de la niña se negó y él entonces le prometió casarse con ella si accedía a su petición.

La mujer, que no fue identificada, contactó a la Policía para denunciar a Randall Keith Midkiff, de Mobile, Alabama, quien tras ser arrestado se declaró culpable de intentar atraer a una menor de edad, informó la Fiscalía Federal del Distrito Sur de ese estado.

En el tribunal, Midkiff admitió que conoció en internet a una mujer del condado de Washington, Alabama, y luego le preguntó si le permitiría tener relaciones sexuales con su hija.

La fiscalía dijo que cuando la mujer lo denunció, Midkiff insistió, le envió un mensaje de texto y le prometió casarse con ella si le permitía tener relaciones sexuales con la niña dos veces por semana.

Pero este no era el único caso en el que Midkiff trató de tener relaciones sexuales con una menor, de acuerdo con las autoridades.

Midkiff admitió que fue llamado a la casa de una familia de Mobile en 2017 para que reparara su aire acondicionado y luego se contactó por Facebook con la hija de 14 años de la mujer que vivía en esa residencia, y también a través de una aplicación telefónica para conocerla para tener relaciones sexuales.

En esa red social, Midkiff comenzó a decirle a la menor que era muy linda, luego hablaba con ella mediante la aplicación Kik. Durante las conversaciones le pedió que se reuniera con él para tener relaciones sexuales y la podía buscar y llevar a un sitio privado, de acuerdo con la fiscalía.

También le dijo que podía mudarse con su madre a fin de que pudieran tener sexo en la casa. Simultáneamente Midkiff le decía a la mamá de la menor que podía ir a vivir con ella y cuidar de la hija y su familia.

Un juez federal lo condenó a 30 años de prisión federal, a libertad supervisada de por vida y le exigió que se registrara como delincuente sexual.