Inicio EEUU ¿Maquillaje con excrementos de animales? No es el último grito de la...

¿Maquillaje con excrementos de animales? No es el último grito de la moda, pero algunos están gritando

El descuento en los precios de cosméticos de presuntas marcas reconocidas era fabuloso, pero los productos ocasionaban erupciones y espinillas. Contenían excrementos de animales, bacterias y desechos humanos. Y no se trataba del último grito de la moda.

Eran cosméticos falsificados que se detectaron en varias tiendas del Fashion District de Los Ángeles, California, y la policía los decomisó tras una operación la semana pasada.

El capitán Marc Reina, de la división central del Departamento de la Policía de Los Ángeles, informó en su cuenta de Twitter que se incautaron productos falsos por un valor de $700,000 en 21 tiendas.

Reina detalló que los cosméticos “contienen bacterias y desechos humanos. El mejor precio no siempre es la mejor ganga”.

Las autoridades realizaron la operación luego de que personas llamaran a las compañías de las marcas reales y se quejaran de sufrir de espinillas y erupciones cutáneas, dijo el portal de noticias Firstcoastnews.

Los productos fueron rastreados hasta el Fashion District, donde policías encubiertos adquirieron los cosméticos para luego someterlos a pruebas, que posteriormente determinaron que contenían bacterias y heces de animales.

“Esas heces simplemente se mezclaron de alguna manera con el producto que están fabricando en su garaje o en el baño, o donde sea que estén fabricando estas cosas”, dijo el detective Rick Ishitani.

Durante la operación, las autoridades decomisaron productos falsos con etiquetas de marcas populares como Urban Decay, NARS, MAC, Kylie Cosmetics por Kylie Jenner, entre otras.

Ishitani dijo que el precio es un indicador de si se está comprando un producto falsificado.

“Si usted consigue un producto con 50 o 75 por ciento de descuento, eso le indica que es malo”, aseguró.

Destacó que las empresas de productos legales deben cumplir con el costoso deber de seguir los estándares de seguridad, mientras que los fabricantes de productos piratas no lo hacen.