Inicio EEUU Meghan Markle, víctima de racismo en la Red

Meghan Markle, víctima de racismo en la Red

Meghan Markle ha publicado un ensayo en la edición británica de la revista Elle sobre el racismo que ha sufrido en Internet porque en la serie en la que trabaja, Suits, el actor que interpreta a su padre, Wendell Pierce, es negro. «Recuerdo los tuits que recibí cuando se emitió el primer episodio de la familia Zane: ¿Por qué han hecho que su padre sea negro? Ella no es negra’ o ‘eh… ¿ella es negra? Siempre he pensado que está buena», relata la intérprete, de 35 años.

Para estar por encima de esos usuarios que le envían mensajes desagradables, la estadounidense —de madre afroamericana y padre caucásico— afirma que ha decidido buscar su propia identidad: «Soy blanca y negra, y cuando esos colores se mezclan, se convierten en gris. De alguna forma, eso forma parte de mi propia identidad: se creó un área turbia de quien yo era, una neblina alrededor de gente que está conectada conmigo. Y eso era gris», explica. 

Meghan, que lleva saliendo con el príncipe Enrique ocho meses, cree que en Estados Unidos todavía prevalecen muchas actitudes racistas. Como ejemplo, la fundadora de la marca de estilo de vida The Tig ha explicado que cuando estaba en séptimo grado (1º de ESO, en España) le pidieron que escribiera su etnia, y las opciones eran «blanco, negro, hispánico o asiático». La profesora le dijo que ella tenía que escoger caucásico, «porque así te ves, Meghan» —recuerda la actriz—. Pero ella decidió no señalar ninguna etnia y dejar la casilla en blanco: «No podía ni imaginarme lo triste que se sentiría mi madre si eligiera esa opción. La dejé en blanco, porque así me sentía», afirma.  

«Cuando era pequeña, un conductor llamó «negrata» a mi madre mientras abandonábamos un concierto en Los Ángeles. Sus ojos se llenaron de lágrimas y solo pude decirle que no pasaba nada. En aquella época, Los Ángeles estaba plagado de protestas como la de Rodney King y Reginald Denny, sucedido unos años antes —unos disturbios raciales de 1992, cuando un jurado absolvió a cuatro agentes de policía que aparecían en una grabación propinando una paliza a Rodney King, un taxista negro—. Compartí el dolor con mi madre, pero quería que ella estuviera a salvo. Condujo hasta casa en silencio. Sus nudillos palidecieron al agarrar tan fuerte el volante», manifiesta Markle. 

La artista se considera a sí misma una mujer mestiza y dice que, ha visto «horrorizada» cómo ambos lados de las culturas que la definen se convierten en víctimas de los medios, «perpetuando estereotipos y recordándonos que en los Estados Unidos quizá solo se han colocado vendajes sobre problemas que se tienen que solucionar de raíz», explica. 

El ensayo llega unas semanas más tarde de que el príncipe Enrique difundiera un comunicado pidiendo respeto por su pareja: «Meghan Markle ha sido objeto de una ola de acoso y de trolls que han hecho comentarios racistas y sexistas sobre ella. No es correcto que, tras unos meses de relación entre él y la Sra. Markle, esta sea sometida a una tormenta», escribió la casa real británica el pasado 12 de noviembre. La relación con el príncipe cuenta con el respaldo de Guillermo de Inglaterra.