La OTAN podría considerar la posibilidad de que otras naciones latinoamericanas además de Colombia, se conviertan en socios de la alianza, dijo el miércoles el secretario general Jens Stoltenberg, al tiempo que al parecer descartó la sugerencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que Brasil podría algún día convertirse en miembro de pleno derecho del organismo de seguridad del Atlántico Norte.
«Hasta 2017, la OTAN no tenía socios en América Latina y luego en 2017 obtuvimos nuestro primer socio, que fue Colombia, y ser un socio cercano de la OTAN es algo que es bueno para la OTAN y para el país socio», dijo Stoltenberg a Reuters en una entrevista antes de una reunión ministerial de la OTAN en Washington.
«Así que, por supuesto, es una posibilidad mirar hacia la posibilidad de tener también otros países en Latinoamérica convirtiéndose en socios, que luego proporciona una plataforma, un marco para estrechar la cooperación política y práctica», dijo.
En una conferencia de prensa conjunta en la Casa Blanca el mes pasado, Trump dijo que le había dicho al presidente brasileño de extrema derecha Jair Bolsonaro que designaría a Brasil como «un importante aliado no perteneciente a la OTAN», y posiblemente vaya más allá apoyando una campaña para hacer de Brasil «Tal vez un aliado de la OTAN», algo que implicaría plena membresía en la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
La membresía de la OTAN se limita actualmente a los países del oeste de Europa, Turquía, Canadá y Estados Unidos, aunque los países socios de la OTAN incluyen Australia y Nueva Zelanda, así como Suecia y Finlandia, países europeos que no son miembros.
Preguntado si un país como Brasil podría convertirse en miembro, Stoltenberg dijo:»No. Los socios no son miembros. Pero los socios son muy cercanos. Trabajamos muy de cerca con ellos, prácticamente y políticamente, y esa es una muy buena manera de fortalecer la cooperación con la OTAN y los países que no son miembros de laAlianza».
Cuando se le preguntó si Brasil se convertiría en socio, dijo: «Bueno, alguien tiene que proponerlo y también tiene que ser una solicitud de Brasil, pero … acabamos de acordar con Colombia para hacer de Colombia un socio cercano de la OTAN y, por supuesto, es absolutamente posible tener más socios en América Latina, pero tiene que ser un deseo expresado de América Latina y por supuesto (es) algo que tenemos que discutir entre los 29 aliados».
Anteriormente, Stoltenberg se dirigió al Congreso de EE.UU. e hizo una defensa apasionada de la asociación a la que llamó «la alianza más exitosa de la historia», que a menudo ha sido ridiculizada por Trump desde que asumió el cargo en 2017.
Colombia llegó a un acuerdo en 2017 para convertirse en la única nación latinoamericana que se unirá a la OTAN como un «socio global». una relación que no llega a ser de estado «aliado», lo que significa que no necesariamente tiene que participar en la acción militar colectiva.
Otros socios mundiales de la OTAN, aparte de los mencionados por Stoltenberg incluyen Afganistán, Irak, Japón, Corea del Sur, Mongolia y Pakistán.
Convertirse en un «gran aliado no perteneciente a la OTAN» en sí mismo implica un mejoramiento del estatus que le daría a un país acceso preferencial a compras de equipo y tecnología militar de los Estados Unidos.
Apoyar a Brasil para ser miembro de la alianza sería un paso considerable más allá, uno que Trump reconoció significaría que él «tendría que hablar con mucha gente».
La membresía de la OTAN se rige por el artículo 10 de su tratado fundacional de 1949, que limita las invitaciones a los estados europeos, sujeto a la aprobación de los miembros existentes y al cumplimiento de los criterios de la alianza.
