El presidente Donald Trump acordó cerrar su fundación de caridad y distribuir el dinero restante a grupos «respetables», anunció el martes la fiscal general de Nueva York.
La fiscal general del estado Barbara Underwood, consiguió una estipulación que disuelve la Fundación Trump bajo supervisión judicial, dijo su oficina. La decisión era el objetivo principal de una demanda presentada por la fiscalía en junio.
La fundación benéfica homónima del presidente de Estados Unidos acordó disolverse bajo la supervisión de la corte, resolviendo parcialmente una demanda del estado de Nueva York que alega que la utilizó indebidamente para promover su campaña presidencial de 2016 y sus negocios.
La demanda contra Donald Trump y sus hijos continuará por acciones relacionadas con la operación de la organización benéfica.
Underwood demandó a Trump y sus hijos adultos Donald Jr., Eric e Ivanka, el 14 de junio, luego de una investigación de 21 meses que, según dijo, descubrió «una extensa coordinación política ilegal» entre la fundación y la campaña de Trump.
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La oficina de Underwood dijo que la Fundación Trump «ha firmado una estipulación que acuerda disolverse bajo supervisión judicial, con la revisión y aprobación por parte de la procuraduría general de las entidades caritativas beneficiarias propuestas, y de los activos restantes de la fundación».
La fiscal general dijo el martes que su investigación encontró «un patrón impactante de ilegalidad que involucra a la Fundación Trump, incluida la coordinación ilegal con la campaña presidencial de Trump, el autocompromiso repetido y deliberado, y mucho más».
Su demanda alegó «conducta ilegal persistente» en la organización de caridad.
La querella contra la Fundación Donald J. Trump también busca recuperar 2,8 millones de dólares y prohibir a Trump y a sus tres hijos mayores de roles de liderazgo en cualquier otra organización benéfica de Nueva York.
El acuerdo, que debe ser aprobado por un juez del estado de Nueva York, le otorgaría a la fiscal general del estado, Barbara Underwood, el poder de examinar las organizaciones benéficas que reciben los activos restantes de la fundación.
Underwood dijo en una declaración que la fundación había funcionado como «poco más que una chequera para servir los intereses políticos y comerciales de Trump», y calificó el acuerdo como «una victoria importante para el estado de derecho».
Alan Futerfas, abogado de Trump, respondió en una declaración que la demanda había retrasado el plan de disolución de la fundación después de que Trump ganara la presidencia de EE.UU., en noviembre de 2016.
Agregó que durante la última década, la fundación había distribuido alrededor de 19 millones de dólares, incluyendo 8,25 millones del dinero personal de Trump, a más de 700 organizaciones caritativas.
Trump ha dicho anteriormente en Twitter que la demanda de Underwood fue una invasión de «sórdidos demócratas de Nueva York». En su moción para desestimar el caso, los Trump dijeron que reflejaba el «sesgo generalizado» de Underwood contra ellos.
El nuevo acuerdo se produjo menos de un mes después de que la jueza Saliann Scarpulla de la Corte Suprema del estado de Nueva York en Manhattan rechazara la moción de desestimación.
La moción había argumentado que la Constitución de EE.UU. inmunizaba a Trump de las reclamaciones de Underwood que alegan el incumplimiento del deber fiduciario, el auto-trato impropio y el uso indebido de activos pertenecientes a la Fundación.
Underwood alegó, entre otras cosas, que Trump cedió el control a su campaña de aproximadamente 2.8 millones de dólares donados a la fundación en una recaudación de fondos en Iowa 2016 para veteranos militares.
Otros gastos impugnados incluyeron 100.000 dólares para resolver una disputa que involucró al resort Mar-a-Lago de Trump y 10.000 dólares para un retrato de Trump que luego se colgó en uno de sus campos de golf.
