En la madrugada de este sábado, un potente tornado ha golpeado el área de Hattiesburg, en el sur de Mississippi, en Estados Unidos, provocando la muerte de al menos cuatro personas y dejando a su paso un rastro de destrucción.
Tres de las víctimas han perdido la vida en sus caravanas, mientras aguardaban a que el temporal amainara. La imagen de la zona, horas después del paso del tornado, es desoladora, con coches volcados, árboles arrancados y viviendas reducidas a trozos de madera y cristales. La policía y los bomberos trabajan ahora casa por casa en el rescate de supervivientes.
El tornado se ha concentrado en Forrest, Lamar y Perry, por la zona de Hattiesburg, según el gobernador de esta región, Johnny Dupree, quien ha firmado una declaración de emergencia por «graves heridas y daños estructurales», sin dar más detalles.