Los ministros de Exteriores de la Unión Europea(UE) destacaron este viernes la importancia de mantener el contacto con Turquía, pese a las críticas por las purgas de Ankara tras el intento de golpe de Estado militar de julio.
«Turquía es un socio importante. Tenemos que aclarar entre nosotros qué queremos de Turquía y con Turquía», dijo el jefe de la diplomacia eslovaca, Miroslav Lajcak, a su llegada a la sede de la Filarmónica de Bratislava.
Además de abordar el conflicto en Ucrania y las acciones para luchar contra el terrorismo y la radicalización, los ministros deben preparar en la capital eslovaca su encuentro previsto el sábado con el ministro turco de Asuntos de la UE, Ömer Çelik.
«Espero que, tras el encuentro de mañana, podamos ayudar a mejorar y normalizar el ambiente» entre el bloque y Turquía, añadió Lajcak, cuyo país ostenta la presidencia semestral del Consejo de la UE.
Desde el intento de golpe de Estado fallido de julio, la UE ha reiterado su apoyo a uno de sus socios más importantes, aunque ha mostrado sus diferencias con Ankara por la purga lanzada en los sectores público, educativo y empresarial tras la intentona.
El primer ministro turco, Binali Yildirim, afirmó el jueves que su país no modificará su legislación antiterrorista, una condición fijada por la UE para aplicar la exención de visado a los ciudadanos turcos para su entrada al espacio de libre circulación europeo Schengen.
En un momento en que Turquía vive «una difícil situación política», es «importante mantener las conversaciones y el contacto», subrayó por su parte el comisario europeo de Negociaciones de Ampliación, Johannes Hahn.
El titular de Exteriores eslovaco y su homólogo italiano, Paolo Gentiloni, rechazaron en esta línea interrumpir las negociaciones de adhesión de Turquía a la UE, aunque mostraron de nuevo sus reticencias sobre la situación de los derechos humanos en el país.
«Debemos ser muy claros en nuestro apoyo a las autoridades turcas tras la intentona golpista y en nuestra petición de respetar el Estado de derecho y los derechos fundamentales», añadió Gentiloni.
