Inicio Internacional Aresep propone luz prepago para 25.000 hogares morosos reincidentes

Aresep propone luz prepago para 25.000 hogares morosos reincidentes

La tarifa prepago de electricidad se aplicaría a morosos recurrentes en forma forzosa. Personas que deseen controlar gasto la podrán pedir voluntariamente.

¿Electricidad prepago? Sí. Ese es el objetivo de un plan de tarifas que la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) sacará pronto a consulta pública con la idea de poder implementarlo este mismo año, solo para clientes residenciales.

Uno de los objetivos es eliminar la morosidad reiterada que identificó en al menos 25.000 hogares. Se trata de abonados que registran al menos cuatro cortes por impago en un año, a los que se les aplicará esta modalidad de cobro automáticamente.

Esto obligaría a esas viviendas a pagar antes por su energía o, de lo contrario, no recibirán el servicio, precisa el estudio tarifario ET-019-2023 abierto este 14 de marzo bajo el título “Propuesta de Fijación de Oficio de Tarifa Modalidad Prepago (T-RP) para las 8 empresas distribuidoras y cooperativas de electrificación rural”.

Desde el punto de vista de los proveedores, indica la Intendencia de Energía de Aresep, el proyecto no solo eliminaría la morosidad, sino que implicaría un ahorro en labores de corte y reconexión, además de procesos administrativos o legales por cobro.

El plan todavía debe validarse en consulta pública en próximas semanas, cuando se recibirían posiciones de distribuidoras y consumidores a favor o en contra de la iniciativa.

Según Aresep, los proveedores también serían libres de mover a prepago a cualquier usuario residencial a quien se les compruebe fraude en el uso de la energía como hurto o alteración de medidores.

El resto de la clientela podrá quedarse con su actual cancelación a fin de mes o pasarse a prepago voluntariamente.

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Morosos reincidentes

El informe técnico IN-0049-IE-2023 considera moroso reincidente a un domicilio con cuatro o más suspensiones por falta de pago en un año; sean consecutivas o no.

Bajo esa categoría se identificaron 25.244 viviendas, que representan casi 2% de las 1,2 millones del país con suministro eléctrico, según datos al 2022 del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

De esa cifra, 10.890 deudores habituales (43%) son atendidos por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y otros 6.667 (26%) por su subsidiaria la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL). Entre ambas, representan 70% de los casos.

Otro 30% se distribuye entre la Empresa de Servicios Públicos de Heredia (1.894), Coopelesca R.L. (2.847), Coopeguanacaste R.L. (1.447) y Coopesantos R.L. (1.413). También entre Coope Alfaro Ruiz R.L. y la Junta Administrativa del Servicio Eléctrico Municipal de Cartago (Jasec).

Las únicas excepciones al prepago, sea por pedido voluntario o automático, serán clientes con facturación binómica (cobro por energía y potencia), aquellos con generación distribuida o que residan con alguien cuya condición de salud lo hace dependiente a un aparato para suministro de oxígeno.

“Está claro que, sin ninguna señal tarifaria que incentive un cambio en su comportamiento, sería de esperar que, una vez anunciadas las condiciones de acceso automático a la tarifa prepago, una parte de este grupo desee salir de esta condición”, precisa el documento.

Para Erick Rojas Salazar, gerente del Consorcio Nacional de Empresas de Electrificación de Costa Rica (Coneléctricas) y vicepresidente de Cámara de Empresas de Distribución de Energía y Telecomunicaciones (Cedet), la iniciativa ayudaría a quienes desean más control de su consumo, pero, advirtió, siempre que sea como una opción a elegir.

En el caso de las cooperativas, dijo, hay poca morosidad y recalcó que primero se debe analizar muy cuidadosamente la legalidad de ese tipo de traslados unilaterales a una nueva modalidad de pago, como lo vislumbra la Aresep.

“Veo complicado por una resolución de una distribuidora pasar a alguien a una dinámica como esta. De nuevo, se deberá revisar muy bien el trasfondo de si alguien acepta esta imposición y sus posibles implicaciones por tratarse de un servicio público”, advirtió.

Posibles obstáculos y reglas

El proyecto comenzaría este año y el registro de suspensiones comenzaría a contarse desde enero anterior para, según Aresep, dar oportunidad de reacción a quienes deseen modificar su conducta.

De esa forma, añadió, pueden prevenir su traslado automático al prepago porque, si ocurre, estarán un mínimo de 18 meses bajo esa categoría, antes de permitírseles gestionar su regreso al pago a final de mes.

Sin embargo, la Intendencia admite en su informe que no será posible trasladarlos a todos al inicio por la ausencia, en muchos casos, de medidores inteligentes, que permiten una desconexión remota del fluido.

Medidores inteligentes podrían ayudarle a bajar su gasto en electricidad, ¿cómo funcionan?

A junio del 2022, por ejemplo, el Grupo ICE (incluye al ICE y la CNFL) tenía instalados 600.000 de esos aparatos mientras que Coneléctricas acumuló 200.000 a febrero de este año. Esos 800.000 aparatos representan 64% de servicios residenciales.

“Esta opción solo se podría hacer si hay presencia de un medidor inteligente”, aclaró Rojas.

Otras reglas de Aresep implicarían que el monto de la primera recarga de la electricidad permitirá un consumo de 15 kilovatios hora (kWh), los cuales solo podrán consumirse en el mes correspondiente. Eso significa que esa energía no podrá acumularse para otros meses y todos los pagos por recargas son en el mismo mes.

Eso sí, el distribuidor deberá entregar un comprobante del monto recibido y la cantidad de kWh con derecho a utilizarse en ese mismo mes.

A partir de la primera recarga, el abonado residencial podrá realizar todas las que considere necesarias pero, advierte la Aresep, si una vivienda acumula tres meses consecutivos sin saldo de energía o recargas, el distribuidor podrá retirarle el suministro.

Para implementar el plan se requiere de medidores inteligentes. En el sector residencial, 64% lo tienen. Fotógrafa Cristina Solís Cabrera.