MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) –
Brian Fallon, quien fue secretario de prensa de la excandidata demócrata a las elecciones de Estados Unidos, Hillary Clinton, ha acusado este viernes al presidente ruso, Vladimir Putin, de estar detrás del ciberataque sufrido por la campaña del candidato al Elíseo francés Emmanuel Macron.
La campaña de Macron denuncia un ciberataque que ha sacado a la luz correos y otras informaciones internas
El Gobierno de Rusia acusa a Macron de vetar a sus medios
En un comentario publicado en su cuenta oficial de la red social, Fallon ha publicado un enlace de una de las noticias que hablan del ataque pirata contra los documentos internos de la plataforma ‘¡En Marcha!’ que lidera Macron, y ha escrito: «Putin está en guerra contra las democracias occidentales».
«Y nuestro presidente (Donald Trump) está en el lado equivocado», ha agregado, en referencia a los vínculos entre los dos mandatarios. Las agencias de Inteligencia estadounidenses ya acusaron a Moscú de estar detrás de la filtración de miles de correos electrónicos de la campaña de Clinton en plena campaña, razón por la que los demócratas argumentan, en parte, la derrota de la ex secretaria de Estado.
El equipo de campaña de la plataforma ‘¡En Marcha!’, del candidato a la Presidencia de Francia Emmanuel Macron, ha denunciado este viernes haber sido víctima de un ciberataque que ha sacado a la luz correos electrónicos y otras informaciones internas a tan sólo dos días de los comicios.
En un comunicado, ‘¡En Marcha!’ ha asegurado haber sido víctima de una «acción de piratería masiva y coordenada» el viernes por la tarde, tras la cual se han difundido en varias redes sociales «informaciones internas de diversa naturaleza».
«Los documentos que circulan (en las redes) han sido obtenidos hace varias semanas gracias al ‘hackeo’ de las bandejas de los correos electrónicos personales y profesionales de varios responsables del movimiento», ha explicado en el texto.
Asimismo, la plataforma ha señalado que junto a los documentos auténticos, los autores del ciberataque han adjuntado documentos falsos «con el objetivo de sembrar la duda y la desinformación». «Al haber tenido lugar al final de la campaña, esta operación está claramente destinada a la desestabilización democrática, como ya ocurrió en Estados Unidos», ha criticado.
La campaña del favorito a las elecciones al Elíseo, que se celebran este domingo, ha señalado que durante todo el período preelectoral ha sido blanco, en repetidas ocasiones, de intentos de ataques piratas, y ha señalado que la «ambición» de quienes están detrás de este ‘hackeo’ es, sin lugar a dudas, «perjudicar» a la plataforma, a pocas horas de que arranque la segunda vuelta de las elecciones.
«Obviamente, los documentos que proceden de este ataque pirata son legales y traducen el funcionamiento normal de una campaña presidencial», ha indicado la plataforma, que ha subrayado que si bien su difusión «hace públicos datos internos», no hay razón para preocuparse por la «legalidad» y «conformidad» de los documentos afectados.
En este sentido, ha adelantado que las cuentas de la campaña –parte de las cuales han sido difundidas– se entregarán «a su debido tiempo» a la Comisión Nacional de Cuentas de Campaña (CNCCFP).
«MEDIDAS NECESARIAS»
En esta situación, ‘¡En Marcha!’ ha hecho un llamamiento a los medios de comunicación dispuestos a informar de esta operación para que «sean responsables conscientemente». «Se trata, en efecto, de una simple operación de piratería, pero también de un intento de desestabilización de las elecciones presidenciales francesas», ha indicado.
Por ello, ha continuado, es necesario «considerar la naturaleza» de los documentos implicados en esta filtración y «ser conscientes» de que gran parte de ellos «son simple y llanamente falsos».
«Tomaremos todas las medidas necesarias con respecto a actores públicos y privados para que se aclare esta operación sin precedentes en una campaña electoral en Francia», ha adelantado.
Por último, la plataforma de Macron ha subrayado la «gravedad de los hechos» es ya una muestra de que «no se puede tolerar que los intereses vitales de la democracia sean puestos en peligro».
