Las diferencias giran ante todo en torno a la salvaguarda para Irlanda, pero ambos consideran que hay tiempo para cerrar un acuerdo.
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La canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro británico, Boris Johnson, han mantenido hoy sus posiciones encontradas con respecto al brexit, pero han manifestado que creen que al final puede llegarse a un acuerdo.
Las diferencias giran ante todo en torno a la salvaguarda para Irlanda, que obligaría al Reino Unido a seguir formando parte de la unión aduanera mientras no se definiesen las futuras relaciones con la Unión Europea tras el brexit.
«La salvaguarda es la expresión de un problema no resuelto. En el momento en que se resuelva el problema ésta no será necesaria», ha dicho Merkel en una comparecencia conjunta ante la prensa durante la visita de Johnson a Berlín.
«Se trata de definir la futuras relaciones entre la UE y el Reino Unido y entre Irlanda e Irlanda del Norte. Es algo que podemos tardar dos años en resolver, pero que también podemos resolver en treinta días«, ha agregado.
Johnson, por su parte, ha subrayado que el Reino Unido quiere una salida negociada, pero ha agregado que el acuerdo no puede mantenerse tal como está y ha afirmado que la salvaguarda no es aceptable.
«La salvaguarda tiene que desaparecer, si eso es posible, entonces tendremos avances», ha dicho el primer ministro británico.
Pese a las posiciones encontradas, Johnson se ha mostrado optimista en que al final se llegue a una solución y ha recordado que muchas veces las negociaciones en Europa parecen sin salida y al final se encuentra un compromiso.
Por otra parte, Johnson ha asegurado que Londres respetará los derechos de los ciudadanos europeos que viven en el Reino Unido.
