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Nursultán Nazarbayev dimite como presidente de Kazajistán tras tres décadas en el cargo

Actualizado 19/03/2019 18:05:24 CET

Aunque por ahora le sucede el presidente del Senado, los ojos están puestos en su hija Dariga

MADRID, 19 (EUROPA PRESS)

El presidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbayev, ha anunciado por sorpresa este martes que renuncia a su cargo tras tres décadas en el poder y se convierte así en el último líder de la era soviética en abandonar el poder.

«Queridos kazajos, compatriotas y amigos, me dirijo a vosotros en un momento muy importante en la historia de nuestro país que hemos estado construyendo juntos… He tomado la difícil decisión de dimitir», ha desvelado el mandatario en un mensaje a la nación televisado.

«Tuve el honor de ser el primer presidente del Kazajistán independiente», ha recordado Nazarbayev, según informa la agencia de noticias Kazinform, destacando que lleva casi 30 años al frente del país.

Nazarbayev, de 78 años, llegó al cargo en abril de 1990, aún bajo la Unión Soviética, y fue elegido como primer presidente del Kazajistán independiente en 1991. El mandatario fue reelegido por última vez en las elecciones de abril de 2015, en las que obtuvo el 97,5 por ciento de los votos.

En septiembre de 2016 nombró a su hija Dariga como vicepresidenta del Senado, en un gesto que fue visto como un posible paso hacia la sucesión de su padre, ya que según la Constitución kazaja si el presidente fallece o se ve incapacitado para desempeñar sus funciones es el presidente del Senado el que ocupa el puesto de forma interina.

Por ahora, el cargo que deja vacante Nazarvayev lo ocupará el actual titular del Senado, Kassym-Jomart Tokayev, hasta que se celebren las próximas elecciones, inicialmente previstas en 2020.

El presidente ha resaltado que Tokayev ha trabajado con él «desde los primeros días de la independencia» y ha sido ministro de Exteriores, viceprimer ministro y primer ministro antes de ocupar la jefatura del Senado. «Conoce el país, su economía y su política», ha sostenido.

Por otra parte, Nazarvayev ha recordado su estatus como «primer presidente de Kazajistán y líder de la nación» y ha dicho que seguirá siendo presidente del Consejo de Seguridad, presidente del partido gobernante, Nur Otan, y miembro del Consejo Constitucional. «Estaré con vosotros», ha prometido a los kazajos.

BALANCE DE TRES DÉCADAS DE GOBIERNO

Asimismo, el veterano presidente ha aprovechado para hacer balance de sus tres décadas en el cargo. «Sobre las ruinas de la Unión Soviética, hemos construido un Estado kazajo exitoso, un país con una economía de mercado moderna y hemos creado la paz y la estabilidad en un estado multiétnico y multiconfesional», ha resaltado.

«Durante estos años habéis respaldado mis iniciativas, me habéis apoyado en todas las elecciones», ha destacado Nazarbayev, que ha apelado a las jóvenes generaciones a «salvaguardar un Kazajistán independiente, nuestra patria común».

«Esta es nuestra nación, la tierra de nuestros grandes ancestros», ha añadido, instándoles a «mantener la amistad y la unidad de nuestro pueblo, nuestra confianza mutua y el respeto a la cultura y a las tradiciones de todos los ciudadanos del país».

Para Antonio Alonso, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad CEU San Pablo, la decisión de Nazarbayev obedece a una «cuestión biológica» por su edad pero también a su constatación de que había llegado el momento de «hacerse a un lado».

En otros países de la región, ha explicado a Europa Press, como ocurrió en Uzbekistán con la repentina muerte de Islam Karimov en 2016, el relevo fue «más traumático» y el presidente kazajo habría «tomado nota».

Por otra parte, ha subrayado que Nazarbayev ya venía preparando desde hacía años una «sucesión tranquila» y ha enmarcado en ella la renovación del Gobierno que acometió el pasado febrero, al que además fijó las metas a cumplir para los próximos años. Según Alonso, con su decisión, el presidente ha demostrado que «no está aferrado al poder y que piensa en el bienestar de los ciudadanos».

En cuanto a su sucesión, apuesta por que en último término sea Dariga, la hija de Nazarbayev, quien termine tomando las riendas del país. «Es muy respetada y goza de gran prestigio dentro y fuera del país», ha indicado el experto, subrayando que es «la sucesora preferida» del presidente ruso, Vladimir Putin, y que con ello Nazarbayev «rompería varios esquemas» en una región «tradicionalmente machista».