Pachuca.- Este martes por la tarde, especialistas del Servicio Médico Forense de la Procuraduría General de Justicia del estado de Hidalgo (PGJEH) trasladaron a Pachuca 53 restos humanos que se encontraron en el predio siniestrado en Tlahuelilpan el pasado 18 de enero.
Los restos fueron transportados en una cámara fría, misma que durante su trayecto fue resguardada por elementos de la policía federal, policía estatal, agentes de investigación, con el acompañamiento de personal de la Comisión de Derechos Humanos del estado de Hidalgo, así como de la Contraloría interna de la Procuraduría.
Esta operación se llevó a cabo conforme a los protocolos establecidos para el manejo de restos humanos y quedó documentada.
La explosión registrada el viernes en Tlahuelilpan, Hidalgo, ya suma 98 muertos, informó este martes más temprano el gobernador de ese estado, Omar Fayad.
El incidente se produjo mientras una multitud recolectaba gasolina que salía a chorros de una fuga en el ducto Tula-Tuxpan, a pocos kilómetros de una importante refinería en el Hidalgo, donde el robo de combustibles se ha disparado en los últimos años.
De los 68 restos humanos hallados en el lugar del incidente, 15 fueron reconocidos por sus familiares y de ellos 14 fueron entregados, uno más está en proceso de entregarse.
La Dirección de Servicios Periciales de la Procuraduría General ha tomado 62 muestras de los familiares de las víctimas, para obtener su perfil genético mientras en el Ministerio Público se iniciaron 69 carpetas de investigación por hechos relacionados con el incidente en mención.
El fin de semana surgieron críticas sobre el proceder de soldados y policías desplegados porque no pudieron contener a las personas. El Gobierno ha defendido reiteradamente su actuación, afirmando que se siguieron todos los protocolos de seguridad así como la estrategia emprendida desde fin del 2018 para tratar de combatir el robo de combustibles, que genera pérdidas por más de 2 mil 500 millones de dólares al año a la petrolera estatal.
