Inicio México Banxico alista aumento de tasa, ante tormenta comercial y financiera

Banxico alista aumento de tasa, ante tormenta comercial y financiera

Esta semana entrarán a escena seis bancos centrales de países emergentes con decisiones de política monetaria. El Banco de México (Banxico), junto con el Banco Central de Filipinas, serán los únicos que subirán su tasa de referencia, según las expectativas del mercado.

De acuerdo con una encuesta levantada por el propio Banxico entre 19 especialistas, 13 se inclinan porque el instituto central eleve su tasa de referencia en 25 puntos base, cinco por que la mantenga y solamente uno se inclina por un aumento de 50 puntos base.

“La tensión comercial y deteriorada dinámica de emergentes en medio de importantes anuncios de bancos centrales provocó presiones a tasas locales de cara a la decisión de Banco de México este jueves”, señalaron en un informe analistas de Banorte-Ixe.

En tanto, en el mercado de futuros se le da una probabilidad del 91.4 por ciento a que Banxico suba su tasa en 25 puntos base, en su reunión del próximo jueves, con base a cifras publicadas por Bloomberg.

Todo apunta para que el Banco de México iguale el aumento anunciado por la Reserva Federal, en la semana pasada, en materia del costo del dinero. De ser así, la Fed y el Banco de México acumularán dos alzas en sus tasas de referencia en este 2018.

Para el Banco Central, los niveles actuales del tipo de cambio serán un factor clave para su decisión, pues el peso ha perdido 9.8 por ciento frente al dólar desde febrero, cuando subió la tasa por última vez. Un día ante de ese aumento, el dólar se vendía en 18.693 pesos en el mercado de mayoreo. En tanto, en la jornada del lunes cerró en 20.519 unidades.

La presión sobre el peso se da dentro de un contexto de un ‘enfriamiento’ en las expectativas de un acuerdo con respecto al Tratado de Libre comercio de América del Norte (TLCAN) y de una intensificación en la guerra comercial entre Estados Unidos y China. Estos factores han sido señalados, por el mismo instituto central, como algunas de las causas que pueden llevar a un mayor deterioro en el balance de riesgos en materia de inflación.

“Estimamos que Banxico elevará su tasa de interés objetivo a 7.75 por ciento desde 7.50 por ciento, además que mantendrá una postura de elevada cautela, particularmente con respecto al balance de riesgos para la inflación. Lo que observamos de mayo a la fecha es que las negociaciones comerciales del TLCAN se han ‘complicado’ y las tensiones comerciales se han elevado, además de que se confirmó que la Reserva Federal de Estados Unidos elevará sus tasas de interés más rápido de lo previsto”, señalaron analistas de Santander.

El otro aspecto a destacar es que la decisión del Banco de México se dará previo a un dato clave, relacionado con el comportamiento del Índice Nacional de Precios al Consumidor. En la primera quincena de junio se espera que este indicador frene, e incluso pueda presentar un moderado repunte.

De acuerdo con una encuesta levantada por Bloomberg se estima que la inflación aumente a 4.57 a tasa anual en los primeros quince días de este mes, por arriba del 4.55 reportado en la segunda parte de mayo.

El otro Banco Central, perteneciente a una nación emergente que, posiblemente dispare un aumento en su tasa, será el de Filipinas, de acuerdo con una encuesta levantada por Bloomberg. De cumplirse el pronóstico, la tasa pasaría de 3.25 a 3.50 por ciento.

En tanto que los bancos centrales de Brasil, Taiwán, Tailandia y Hungría las podrían mantener sus tasas en 6.50, 1.375, 1.50 y -0.15 por ciento en cada caso.

Para el único banco perteneciente a una nación desarrollada, el de Inglaterra, que está programado para dar un anuncio de política monetaria, se adelanta que mantenga a su tasa en 0.50 por ciento. El anunció se dará el próximo jueves.

En la repuesta de los bancos centrales de naciones emergente y del perteneciente a Inglaterra, es importante luego de que en la semana pasada la Reserva Federal y el Banco Central Europeo dieron un paso en el retiro de estímulos monetarios, que sirvieron para hacer frente a la gran crisis económica de 2008-2009.