Durante las operaciones de media semana, los mercados en Estados Unidos mostraron un sesgo entre negativo y flat en medio del desempeño de sus pares en el mundo y reportes trimestrales que presionaron los índices a la baja, particularmente el de la empresa de transporte CSX.
En este escenario, el promedio industrial Dow Jones perdió 0.42 por ciento, que lo ubican en 27 mil 219 puntos; el S&P 500 cayó 0.65 por ciento, a las 2 mil 984 unidades, y el tecnológico Nasdaq retrocedió 0.46 por ciento, a los 8 mil 185 puntos.
Durante esta temporada de resultados, se espera que las ganancias para las emisoras que integran el S&P 500 aumenten 0.4 por ciento con respecto a las de hace un año.
De las 43 empresas que han informado resultados a la fecha, el 83.7 por ciento han superado las estimaciones de los analistas, aunque se empieza a notar cierta debilidad que podría amortiguar las perspectivas de crecimiento.
En datos económicos, las viviendas nuevas en junio mostraron un retroceso mayor al esperado de 0.9 por ciento contra el mes previo, mientras que los permisos de construcción del mismo mes cayeron 6.1 por ciento, su mayor descenso desde marzo de 2016.
Durante la sesión también se publicó el libro Beige de la Fed, el cual mostró una perspectiva general positiva para la economía estadounidense en los próximos meses y un crecimiento modesto, a pesar de las preocupaciones generalizadas sobre el posible impacto negativo del comercio.
En el mercado energético, los precios del petróleo apuntaron su tercer día de caídas de forma consecutiva para igualar la marca de finales de mayo, luego de que la Administración de Información de Energía de Estados Unidos señaló que aumentaron los inventarios de gasolinas y derivados del petróleo.
La perspectiva de un mayor deterioro comercial entre Estados Unidos y China hace eco en las perspectivas de crecimiento mundial y pone nerviosos a las empresas petroleras y a los operadores.
El WTI en Nueva York perdió 1.89 por ciento, a los 56.52 dólares por barril. Mientras que el Brent en Londres cayó 1.26 por ciento, a los 63.54 dólares por barril.
A nivel accionario, las caídas fueron impulsadas por el sector industrial de transporte y el energético.
Los títulos de CSX cayeron 10.27 por ciento, su mayor descalabro desde la crisis de 2008, después de que un pronóstico débil de ventas avivara los temores de una caída mayor para la empresa de transporte. Le siguieron Textron, Norfolk Southern y Union Pacific.
Por el contrario, las emisoras que avanzaron después de batir sus estimados fueron Cintas, que ganó 8.74 por ciento, acompañada de Abbot Labotatories, Hershey’s y Conagra Brands.
En México, las bolsas locales fueron arrastradas a la baja por segundo día consecutivo, a pesar de que los títulos de América Móvil presentaron movimientos positivos tras la publicación de sus resultados.
El Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) cayó 1.01 por ciento, que lo ubican en 42 mil 551 puntos, mientras que el FTSE BIVA perdió 0.89 por ciento, a las 870 unidades.
A nivel bursátil, las emisoras que presentaron los principales movimientos al alza fueron América Móvil, que avanzó 3.45 por ciento,;le acompañaron Grupo Elektra, Genomma Lab y Grupo Bimbo.
Los títulos que apuntaron un desempeño negativo fueron Grupo México, que perdió 4.23 por ciento, seguido de Grupo Financiero Banorte, Alfa y Grupo Carso.
