La Inmobiliaria Ruba, busca aumentar en mil millones de pesos un programa que fue aprobado por las autoridades financieras del país en 2017, con el cual puede emitir deuda de largo plazo.
De ser autorizada esta petición, entonces, ahora la inmobiliaria podrá obtener un total de dos mil millones de pesos a través de la emisión de bonos de largo plazo.
La compañía ya lleva dos emisiones de 500 millones de pesos cada una. La primera de esas colocaciones fue con un bono que vence en julio de 2020 y que es identificado con la clave de pizarra RUBA 15.
La segunda oferta pública corresponde al bono que tiene un plazo para 2022 y que opera con la clave de pizarra RUBA 17.
Hace unos meses, Fitch Ratings subió la calificación de largo plazo en escala nacional a A+(mex) desde A(mex), y revisó la perspectiva a “estable” desde “positiva”.
De acuerdo con el reporte financiero al tercer trimestre del año, los ingresos de la desarrolladora registraron un incremento de 32 por ciento, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Asimismo, la utilidad bruta mostró un aumento de 40 por ciento, mientras que el EBITDA creció 57 por ciento, impulsado por un buen control del gasto operativo y del costo financiero.
El reporte financiero, refiere que durante los primeros nueves meses del 2018 Ruba escrituró siete mil 860 viviendas, 428 unidades más que el año pasado. 
