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Candidatos al desnudo

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¿Se imaginan a Andrés Manuel López Obrador explicando sus propuestas sin mencionar todos los defectos de ‘la mafia del poder’? ¿O a Margarita Zavala sin hablar del ‘tirano’ Ricardo Anaya? ¿O un PRI que no diga que Morena es ‘un peligro para México’?

El show y la simulación en que se ha convertido la política en México nos acostumbró a ver en los debates presidenciales una oportunidad más de descalificaciones de unos contra otros, pero esta vez, frente a frente. Eran por tradición espacios en los que los periodistas, lejos de estar pendientes del cómo lograrían las pocas propuestas que arrojan, estaban pendientes del escándalo que revelaría un candidato contra el que fuera puntero en ese momento.

Ahora, al menos desde la intención del Instituto Nacional Electoral, vamos a tener que visualizar a un grupo de candidatos fuera de su zona de confort. En este espacio ya habíamos abordado la necesidad de que los debates presidenciales se convirtieran en una oportunidad de quitarle a un político el discurso en prompter, hacerle preguntas que no ha ensayado y no darle margen de recurrir a la guerra sucia y a las descalificaciones contra los opositores. De eso tendremos hasta el cansancio durante las campañas.

Ayer, en una votación 10 contra 1, el consejo general del INE aprobó los lineamientos generales de los tres debates presidenciales y hubo oportunidad de innovar, al menos en cuanto a reglas se refiere. Se tratará de tres ejercicios inéditos en los que aquel moderador que parecía sólo la persona a quien contrataban para darle la palabra a cada candidato e interrumpirlo cuando sus minutos se terminaran, tendrá una participación más activa –quizá definitiva– en el ejercicio que desde siempre debió de ser de contraste.

La opción de que los ciudadanos participen, que haya más de un moderador y que éste pueda improvisar y pedir ampliación de respuestas, es una apuesta del INE para que en una contienda electoral tan compleja como la que veremos en 2018, los votantes tengan elementos más contundentes para saber lo que marcarán en la boleta el 1 de julio.

“Se trata de que la audiencia pueda conocer mejor y de manera directa las opiniones de cada contendiente, sus reacciones ante preguntas eventualmente incómodas, así como el manejo de los temas que son de interés común de cara a la emisión del voto”, señaló Lorenzo Córdova durante la discusión de estas reglas básicas que fueron discutidas con los partidos políticos.

En septiembre cuestionábamos el por qué no se atrevían los candidatos a quitarse las ataduras de un formato acartonado, que les permitiera mostrar un debate real y no un intercambio de acusaciones de las que tanto nos atascan en época de campañas. Ahora tienen la opción de volver los tres debates aprobados (uno en abril, uno en mayo y el último a principios de junio) un auténtico ejercicio para mostrarnos quiénes son y por qué tendríamos que dejarlos llegar a la silla presidencial.

Aunque habrá bloques temáticos previamente seleccionados, con tópicos específicos que todos los contendientes conocerán de antemano, las preguntas en particular no las sabrán hasta el día del debate, habrá opción para preguntas abiertas y para preguntas que surjan en ese momento, y muy importante: los ciudadanos tendrán la opción de participar directa e indirectamente y cuestionarlos. Será un escenario en el que tendrán poco control y donde serán examinados con lupa.

¿Estas reglas nos garantizan un debate real, propuestas concretas, candidatos abiertos y sinceros? Claro que no. Pero será una gran oportunidad para que aquellos que basen sus campañas en guerra sucia y en promesas sin sustento y carta de buenos deseos, queden expuestos.

Habrá que ver quiénes serán los moderadores elegidos por el INE, quienes también tendrán un papel fundamental, pues podrán cuestionar con datos duros aquello que el candidato esté diciendo.

No podemos evitar tener a los políticos de siempre, tratando de engañarnos, repitiendo un mismo discurso, y prometiendo lo que no pueden cumplir. Pero ahora, al menos, tenemos la opción de ser ciudadanos diferentes, capaces de evidenciarlos en vivo y en directo. Al fin, candidatos al desnudo.

Twitter: @jrisco

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