Carlos Ghosn, que está acusado de abuso de poder y otros delitos en Japón, renunció este jueves a su cargo como presidente de Renault, dijo el ministro francés de Finanzas.
El ejecutivo, que lleva más de dos meses detenido en Japón, presentó formalmente su renuncia a la dirección temporal de Renault el miércoles en la noche, anunció Bruno Le Maire en el Foro Económico Mundial de Davos.
Se espera que la junta directiva de la automotriz francesa Renault nombre a Jean-Dominique Senard, de Michelin, como presidente y al ejecutivo de Renault, Thierry Bollore, como director general.
Ghosn, quien fue detenido el pasado mes de noviembre en Japón, niega las acusaciones presentadas en su contra por no haber declarado supuestamente ingresos como presidente de Nissan y por la presunta falsificación de informes financieros.
Ese mismo mes, el directorio de la empresa japonesa decidió el despido de Ghosn como su presidente, medida a la que días después se sumó Mitsubishi.
Estas armadoras japonesas, junto con Renault, forman una de las alianzas automotrices más grandes del mundo.
En Japón, la pena máxima por violar las leyes financieras es de 10 años de prisión, una multa de 10 millones de yenes (89 mil dólares) o ambas. La tasa de condena del país es de más del 99 por ciento.
