CBD/Bajío, una empresa ubicada en el municipio de Valle de Santiago, Guanajuato, trabaja desde hace un año en el desarrollo de negocios de cannabis medicinal y el cáñamo industrial.
Héctor Nieto, director de la compañía, indicó que por lo pronto la empresa no puede operar hasta que salgan los lineamientos regulatorios por parte de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Su equipo de colaboradores incluye médicos y científicos especializados, así como abogados en el tema y consultores.
La firma guanajuatense busca tener, como punta de lanza en México, un laboratorio certificado en donde se pueda estudiar la planta tanto científicamente como medicinalmente.
En este caso, se plantea un invernadero con 250 especies prototipo medicinales, que se analicen en el laboratorio, y se identifiquen los cannabinoides que tienen para redirigirlos al tratamiento de diferentes enfermedades.
“Esos son los proyectos que traemos, y creemos que es tan importante la salud de la gente, como la del planeta”, sostuvo Héctor Nieto.
Destacó la importancia de que las autoridades aprueben la brevedad la regulación a la Ley General de Salud, para que se puedan concretar los proyectos en materia de salud e investigación, así como en las distintas industrias involucradas en el país.
“Es fundamental estar dentro del marco jurídico”, sostuvo. “El reglamento ha tardado, y es un sector muy importante, que puede ayudar a muchas personas en el tema de salud, y representa una industria millonaria, la cual traería empleo, y apoyaría económicamente a muchas personas.”
Por otra parte, Héctor Nieto destacó que el cáñamo representa una opción para el desarrollo de proyectos sustentables en industrias como la de la construcción, textil y de energía. Es una planta derivada del cannabis, con ciertas características particulares relacionadas, entre otras, con los niveles de tetrahidrocannabinol (THC).
Hay tres tipos de cáñamo, uno de ellos es de tallo muy alto, fibroso, el cual se utiliza para la construcción, para la confección de ropa y calzado, la elaboración de plásticos y de biocombustibles.
De acuerdo con el directivo, en la construcción, dicho material es aislante, termoacústico, tiene características parecidas a las de la arcilla en cuanto a la temperatura, y los costos son 50 por ciento menores por proyecto.
Otra variedad de la planta, tiene una semilla mucho más fortificada, con un alto contenido de proteínas; y la tercera, se utiliza para la obtención del cannabidiol (CBD) puro, que es uno de los activos que se aplica en tratamientos médicos.
El proyecto de cáñamo de CBD/Bajío considera el cultivo de cincuenta hectáreas de cada variedad de cáñamo, y la participación de inversionistas, quienes aportarán el know how del negocio. Una vez transformado el producto se comercializaría, comentó el directivo.
