Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey, fue designado como presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), este martes. “Con gran alegría les comunicamos los resultados de las votaciones del Consejo de Presidencia para el trienio 2018-2021. Que nuestro Señor Jesucristo y Santa María de Guadalupe bendiga sus nuevas encomiendas episcopales” escribió la CEM en su cuenta de Twitter.
En un infograma, se muestra que el arzobispo de Morelia, Carlos Garfías Merlos, será el vicepresidente; el secretario general será el obispo auxiliar de Monterrey, Alfonso Miranda Guardiola; como tesorero, fue electo el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro; al obispo de Zamora, Javier Navarro Rodríguez, la corresponderá la primera vocalía y al de Nogales, José Leopoldo González González, le tocará la segunda vocalía.
Tras resultar ganador en las votaciones, Cabrera López agradeció el nombramiento en su cuenta de Twitter: “Agradezco la confianza que mis hermanos Obispos han depositado en mi persona para asumir la Presidencia @IglesiaMexico por el trieno 2018-2021. Me encomiendo a sus oraciones y a la guía de Santa María de Guadalupe”.
Cabrera López relevará en su cargo a José Francisco Robles Ortega y, al continuar los trabajos de la plenaria, estará al pendiente de las discusiones entre unos 130 obispos del país, para aprobar el Plan Nacional de Construcción de Paz 2018.
Tras la renovación de quienes encabezarán la dirigencia de la CEM, comenzarán el análisis de la propuesta de la Comisión Nacional de Protección de Menores, y la aprobación de la ruta de implementación del Proyecto Global de Pastoral 2031-2033.
Arzobispos y obispos también discutirán la propuesta de desmembramiento de nuevas diócesis de la Arquidiócesis Primada de México y creación de la nueva Provincia Eclesiástica.
Entre los temas coyunturales, estudiarán la respuesta que darán a las propuestas de algunos integrantes de Morena para ampliar las causales de la interrupción de embarazos y las uniones entre personas del mismo género que atentan contra la familia.
Además, se discutirán esquemas de auxilio eclesiástico durante emergencias nacionales como las marchas migrantes, y los daños ocasionados por fenómenos geológicos, meteorológicos y de otro tipo.
