Inicio México Consciencia fiscal; pensiones y repercusiones por cambios legales

Consciencia fiscal; pensiones y repercusiones por cambios legales

Fuente: Cortesía

Como sabemos, el IMSS cambió la forma de calcular las pensiones de los trabajadores que ingresaron a laborar a partir del 1º de julio de 1997.

Esta Ley establece que las pensiones de los trabajadores se pagarán exclusivamente con los recursos acumulados en sus cuentas individuales que administran las AFORES.

El problema es que se estableció una aportación insuficiente para lograr que las personas que se pensionen bajo esta Ley, puedan mantener el nivel de vida que tenían hasta ese momento, ya que como lo comenta la CONSAR y también la OCDE, el rango de las pensiones ascenderá entre el 25 y 30 por ciento del salario que están percibiendo al momento de pensionarse.

La aportación del 6.5 por ciento de su salario a las AFORES es una de las aportaciones más bajas a nivel mundial entre los países que tienen planes de pensiones obligatorios.

Considerando esta situación, el panorama que se presentará en un futuro muy cercano para las empresas (a partir de 2021) es preocupante, ya que los trabajadores no podrán jubilarse a partir de los 60 años de edad, lo que traerá como consecuencia para las empresas que se irán llenando de personas mayores, insatisfechas y frustradas que ocuparán los puestos que les corresponden a las nuevas generaciones, los que también se frustrarán al ver que no podrán cubrir las posiciones que tienen los trabajadores con más edad y antigüedad en la empresa.

Este panorama no es alentador ni para las empresas ni para el país en general, ya que tendremos un México con una población adulta en aumento, sin las condiciones que todo trabajador aspira al concluir una vida de trabajo para disfrutar una vejez tranquila.

Hasta el momento, la única solución a ésta alarmante realidad es, concientizar a todos los trabajadores que están en la llamada “Generación Afore” a que ahorren por su cuenta, ya sea en su AFORE o en otro medio que se les ofrezca, como puede ser en las cajas de ahorro que administran las propias empresas.

El problema que yo veo es que ni las empresas ni las AFORES están haciendo un esfuerzo, lo suficientemente efectivo, para informar y luego concientizar a los trabajadores que pertenecen a la “Generación Afore” de que la única alternativa que tienen es su ahorro personal.

El último reporte que tenemos de la CONSAR es que el monto de los ahorros voluntarios que manejan las AFORES alcanza el 1.9 por ciento del total de los recursos que manejan. Esto nos demuestra que se ha logrado muy poco avance en la promoción del ahorro voluntario entre los trabajadores.

En el informe de la CONSAR que publicó en septiembre pasado titulado “Diagnóstico del Sistema de Ahorro para el Retiro en México”, señala como uno de los retos que tienen la CONSAR, las AFORES, las empresas, los sindicatos y el propio Gobierno, es impulsar la educación financiera y la cultura previsional de mediano plazo.

Como conclusión puedo señalar que a mi parecer, las que deberían estar más interesadas en coadyuvar a resolver este problema son las empresas, ya que de no hacerlo, van a sufrir las consecuencias en carne propia.

El autor es licenciado en relaciones Industriales por la Universidad Iberoamericana Con más de 25 años en el área de Recursos Humanos en varias empresas, más de 10 años promoviendo el ahorro y actualmente como consultor de empresas en materia de retiro.

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