Fuente: Félix Vásquez
La verdad, es que la inversión gubernamental en el nuevo aeropuerto es mucho menor a la que consignan los documentos oficiales, incluso considerando lo invertido por el Fondo Nacional de Infraestructura (FIDEIN), las obras hidráulicas de CONAGUA y los distribuidores viales construidos por la SCT, como lo analizamos a continuación.
Si bien el proyecto original, en 2014, era de 169 mil millones de pesos, (con un tipo de cambio de 13 pesos por dólar) y contemplaba una inversión federal a realizar del orden de los 101 mil 208 millones de pesos, ya para este año 2018 el presupuesto modificado alcanzaba los 113 mil 19 millones de pesos, un incremento del 12 por ciento sobre el presupuesto original.
En el Presupuesto de Egresos para este año 2018, se informa que YA se han invertido en el proyecto 73 mil 544.5 millones de pesos, y que para finales de 2018, la inversión federal presupuestal alcanzará los 102 mil 65.7 millones de pesos, es decir, más de un NOVENTA por ciento de la inversión programada, sin embargo, Grupo Aeroportuario sólo ha recibido unos 57 mil millones de pesos, vía aportaciones de capital, por lo que las cifras no cuadran.
Una primera desviación entre lo que se reporta como “Invertido” y lo que se puede documentar, se ubica desde antes que se aprobara formalmente el proyecto (2014) ya que en 2013, el gobierno autoriza a Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) a disponer de cuatro mil 752.6 millones de pesos del Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN) para iniciar los estudios, sin embargo, una revisión de la Auditoría Superior de la Federación, en 2015, puso de manifiesto que lo invertido por ASA era de solo 595.7 millones de pesos, quedando SIN EJERCER cuatro mil 156.8 millones de pesos, y peor aún, de ese monto gastado ni un solo peso estaba registrado, ni en ASA, ni en la SCT, ni en Grupo Aeroportuario, ni en ninguna otra dependencia gubernamental, pero eso sí, los casi cinco mil millones de pesos ya estaban registrados en 2015 como “Inversión Pública” en el nuevo aeropuerto, la cual obviamente, NO es real.
Sin embargo, lo verdaderamente grave, con relación a los recursos que supuestamente está invirtiendo el Gobierno Federal en este proyecto, (a través de Grupo Aeroportuario) es que NO provienen de verdaderos ingresos presupuestales, sino de los MISMOS créditos contratados y bonos colocados.
La ruta del dinero es como sigue: Grupo Aeroportuario SIMULA ceder sus derechos de cobro de TUA a NAFINSA, (a cambio de una contraprestación INDEFINIDA), misma que para pagarla, constituyen un Fideicomiso (según esto PRIVADO) el cual pedirá dinero prestado, dando en garantía los derechos de cobro del TUA, y usa el dinero de los créditos para “pagar” la supuesta cesión de derechos que hizo Grupo Aeroportuario.
Grupo Aeroportuario recibe entonces el dinero de los CRÉDITOS, y lo registra como ingreso propio excedente (NO presupuestado) mismo que utiliza para PAGARLE al Gobierno Federal Aprovechamientos a su cargo, (tampoco presupuestados) como contraprestación por la Concesión del aeropuerto.
Acto seguido, la SHCP le REGRESA a Grupo Aeroportuario, como ampliación presupuestal para inversión, vía APORTACIÓN DE CAPITAL, estos recursos, los cuales finalmente van al Fideicomiso 80726, constituido en 2014 de manera específica para estos efectos.
Es decir, la mayor parte del dinero proveniente de los créditos y de los Bonos Verdes, se “lava” primero transformándolo en ingreso “Propio”, primero de Grupo Aeroportuario, y luego de Hacienda, para después regresarlo como aportación de CAPITAL a Grupo Aeroportuario, siendo registrado posteriormente como “INVERSIÓN PÚBLICA”, como ven?
Grupo Aeroportuario le ha pagado a la SHCP unos 40 mil millones de pesos de “Aprovechamientos” provenientes casi en su totalidad de las deudas contratadas para el nuevo aeropuerto, y la SHCP le ha aportado como Capital unos 57 mil millones de pesos, etiquetados para “Inversión Pública” del nuevo aeropuerto.
Es decir, de los recursos “Públicos” aportados por el Gobierno Federal para la construcción del nuevo aeropuerto, vía Grupo Aeroportuario, sólo un 30 por ciento son en realidad “recursos públicos”, ya que el 70 por ciento provienen de los propios créditos contratados, lo que sin duda va a conducir a problemas para “completar” la inversión, ya que hay una doble contabilización que hace que las cifras “no cuadren”, amén del engaño a los inversionistas.
El autor es especialista en estudios económicos y de finanzaspúblicas. Actualmente ocupa el cargo de Socio en Economía en Pérez Góngora y Asociados.
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