Pierre Alarie, embajador de Canadá en México, negó este martes que cuatro empresas constructoras de gasoductos en México, incluida una canadiense (TC Energía), hayan iniciado un un arbitraje en contra de la compañía del Estado.
Lo anterior, luego de que el director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett, asegurara más temprano que las compañías IEnova, TransCanada y Fermaca fueron las primeras en acudir a medidas cautelares sobre la construcción de los gasoductos, por lo que el Gobierno federal decidió aplicar medidas ‘espejo’ y comenzar un proceso de arbitraje internacional.
“IEnova, mientras esperábamos con la mejor intención iniciar una renegociación, se adelantó también e interpuso una demanda arbitral contra la CFE”, dicta la afirmación que la compañía desmintió después.
“Eso no es cierto (que las empresas canadienses hayan empezado un arbitraje), genera muchísima confusión, hay diferencia entre un amparo y un arbitraje, por ejemplo, las empresas sí se protegieron, pero no empezaron un proceso de arbitraje.
«Yo pienso que la CFE está usando solo parte de la información y no toda la información”, dijo Alarie, entrevistado en el Sorteo de la Lotería Nacional alusivo al 75 aniversario de la relación bilateral México-Canadá.
El diplomático indicó que los comentarios emitidos por los funcionarios de CFE generan más incertidumbre entre los inversionistas y hacen que el riesgo de inversión en el país se incremente.
«(Las declaraciones dejan) más incongruencia, claramente, y dejan también mucho más confusión en los inversionistas porque ¿cuál es el riesgo? Cuando un inversionista mira a la posibilidad de una inversión en un país, ya sea en su país o el extranjero, mide el riesgo, y cuando hay mucha incertidumbre, el riesgo sube y los costos suben y eso es la peor señal que se puede mandar al mercado”, agregó.
El representante canadiense afirmó que hay soluciones prácticas que se podrían tomar para no mantener pausado el flujo de gas en el ducto Texas-Tuxpan y que al mismo tiempo abonen a construir una negociación que beneficie a las partes.
“Nosotros quisiéramos, si fuera posible, buscar una solución antes de llegar al arbitraje (…) Por ejemplo, dejar fluir el gas en el gasoducto desde el viernes 5 de julio, eso podría también un poco calmar el juego y llevar gas a México y que se ganar-ganar para las dos partes”, dijo Alarie.
Por otro lado, Alarie destacó la importancia del proyecto que costó alrededor de 2 mil 600 millones de dólares, y recalcó que hasta el momento ha sido imposible sentarse con la CFE a solucionar el asunto.
“Por el momento ha sido imposible sentarse con la CFE. La única cosa que estamos pidiendo es una apertura de la CFE que necesitamos para negociar de buena fe, no solamente sentarnos y mirarnos a los ojos.
«Hay que buscar una solución, yo estoy seguro que las empresas canadienses están dispuestas a mirar los contratos y a buscar una solución, hace seis meses que estamos esperando para negociar”, dijo Alarie.
AMENAZA AL T-MEC
El embajador dijo que este tipo de situaciones también podrían dar “municiones” para que quienes están en contra de la aprobación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Seguramente da mucha munición a la gente que está en contra (del T-MEC), algunos políticos que van a utilizar este tipo de información para destruir un poco el ámbito del espacio norteamericano, lo siento mucho por eso, pero hay que disipar todas las dudas y por eso dije que necesitamos reglas del juego claras”, señaló.
