Inicio México Esta linterna creada por estudiantes mexicanas sustituye las baterías por orina

Esta linterna creada por estudiantes mexicanas sustituye las baterías por orina

Estudiantes del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Campus Santa Fe, desarrollaron una linterna sustentable que en lugar de baterías alcalinas funciona con líquidos ricos en sodio, como refrescos, agua mineralizada y hasta orina.

Jimena Solís y Daniela Carrillo iniciaron con la idea de crear dicha lámpara en 2016 cuando ingresaron a la Semana de Innovación del Tec. Posteriormente, cuando sucedió el sismo del 19 de septiembre de 2017, detectaron que eran linternas y pilas algunos de los artefactos con más demanda en dicho desastre natural.

La idea de continuar desarrollando el proyecto creció con tal acontecimiento hasta llegar al dispositivo actual, llamado Emergency Light.

En entrevista para El Financiero, las estudiantes de sexto semestre de Ingeniería en Desarrollo Sustentable e Ingeniería en Innovación y Desarrollo del Campus Santa Fe, explicaron que la energía se produce mediante la transferencia de electrones de un metal a otro al interior de la linterna.

“La energía que producimos es energía iónica. Literal, es una transferencia de electrones de un metal a otro”, dijeron vía telefónica.

“Utilizamos dos tipos de metales, uno altamente positivo y el otro negativo. El positivo le cede electrones al metal negativo mediante el líquido. Eso es lo que produce la energía y posteriormente la luz”, agregaron.

El líquido que transporta los electrones debe ser rico en sodio. Ejemplo de ellos, además de la orina, son los refrescos, aguas mineralizadas y bebidas energéticas y deportivas.

La orina funciona porque es un líquido rico en sodio. También funciona con agua salada, agua mineral, y otros productos que contienen sodio como las bebidas hidratantes y energéticas”, añadió Jimena Solís.

El exterior de la lámpara está hecho con plástico biodegradable y es de dimensiones pequeñas. Para funcionar requiere apenas 30 mililitros de líquido. Con esa cantidad, la lámpara puede estar encendida durante 15 días consecutivos sin apagarse.

Las jóvenes estudiantes señalan que desde 2017 han hecho 4 actualizaciones de su producto e indican que aún no podríamos hablar de una versión final ya que trabajarán en realizar ajustes.

Actualmente ya hay una empresa de inyección de plástico interesada en producir y comercializar el producto de Jimena y Daniela además de que trabajan con la incubadora del Tec.

Aunque aún desconocen el precio que tendría el producto, estiman que rondaría entre 800 y mil pesos.

En México se desechan alrededor de 35 mil toneladas al año de baterías alcalinas, razón por la que el uso de este tipo de dispositivos generaría un impacto ambiental positivo.

“Una de las principales metas que nos planteamos fue la de evitar el uso de materiales que pudieran ser contaminantes para el medio ambiente; por ello, nos concentramos en realizar prototipos con componentes que fueran acorde a la filosofía del producto”, concluyó Daniela Carillo.