Inicio México Evolución, eficiencia y eficacia en la industria energética nacional

Evolución, eficiencia y eficacia en la industria energética nacional

Luis Gónzalez VillarealFuente: Cortesía

Estimado lector, para las empresas privadas la palabra reingeniería de procesos no es algo nuevo, tenemos desde principios de los años noventa en que se convirtió inclusive en algo cotidiano para la industria.

Cualquier empresa nacional o internacional, pública o privada que no tenga actualizaciones constantes, que no piense primero en el cliente o en su usuario y que no trabaje en la eficiencia está destinada al fracaso.

Actualmente vemos que nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se encuentra realizando una gran transformación de México, en la que han bajado los sueldos de los funcionarios y en donde serán invertidos grandes recursos para reactivar a las empresas productivas del Estado (Pemex y CFE).

En cualquier proyecto de inversión lo que los inversionistas buscan son los mayores rendimientos. En el caso particular de Pemex, se tenían grandes fugas por el robo de combustibles, acto conocido como Huachicol, aunque gracias al combate a la corrupción realizados por el gobierno de AMLO, la empresa ha minimizado sus pérdidas en este rubro, pero aquí es necesario ir más lejos, ya que se necesita actualizar y renovar a la empresa, y revisar todos sus procesos, desde la exploración, la extracción, la refinación y/o importación, el almacenamiento, la distribución, el transporte , la comercialización, y así, hasta la venta al último consumidor.

En el ramo energético las nuevas tecnologías, permiten minimizar los tiempos, los defectos o las fallas de producción, los sobre costos, los errores humanos y todos estos avances permiten mejorar el confort del usuario final. Las empresas públicas y privadas, al igual que los gobiernos, deben mejorar su rendimiento y enfocar su filosofía hacia la mejora continua.

Es importante dejar claro cuáles serán los resultados a obtener con las mejoras del nuevo Pemex, el de la transformación de AMLO. Al reactivar toda la industria energética del país, es necesario realizar una reingeniería desde la base de la estructura operativa, cambiar, y no reparar los procesos que son obsoletos, para reinventar y actualizar la empresa. Hay que dejar de conformarnos con los malos resultados, es decir con la baja en la producción y refinación que hemos vivido en los últimos años, hay que creer en el proyecto, aunque claro que hay que cuidar los valores y las creencias del personal, pero sobre todo buscar la rentabilidad petrolera.

El replantearse que es lo importante para la empresa y sobre todo para los usuarios, medir los tiempos de cada proceso, analizar por qué existen las demoras desde la raíz o el origen de los problemas, llevar un verdadero control de toda la cadena de valor es necesario para la sustentabilidad y para la generación de utilidades, mismas que se deben de reinvertir en la empresa y generar beneficios a la población. Hay que dar un enfoque a cada uno de los productos que procesa Pemex, en la búsqueda de ser lo más eficientes y competitivos en el mercado global.

¿Por qué pensar únicamente en exportar crudo, si también podemos reactivar la petroquímica y ser grandes exportadores? Esto bien administrado contribuiría a mayores utilidades para la empresa.

Muchos piensan que reingeniería pueden significar despidos de personal, pero más bien es una actualización, en la que las funciones que son obsoletas, que generan sobre costos se transforman, claro que se capacita y se reacomoda al personal para los nuevos puestos, alineándose con la nueva tecnología y con los nuevos objetivos de la empresa.

La eficiencia, la eficacia y calidad se puede lograr, hay que pensar en el cliente, ver cómo trabaja la competencia y por supuesto tener una mayor preocupación por el medio ambiente, estos son algunos de los puntos centrales que les brindaran seguridad a los proyectos de inversión en nuestras empresas productivas del Estado .

La transformación se puede realizar, aunque por naturaleza o por miedos generalmente nos resistimos a los cambios, pero hay que recordar que nuestro mundo está en constante evolución.

¿Cree usted que podamos abandonar viejas formas de trabajo y adaptar a las empresas a las nuevas tecnologías, así como a las estrategias de competitividad energética que nos podrían generar grandes resultados?

Si hacemos lo que debemos, conseguiremos lo que nunca hemos obtenido. ¡Hasta la próxima!

El autor es CEO de Petroland, comercializadora de combustibles en México desde Refinerías y Terminales de Texas; ex Director General de Franquicias de Pemex y constructor de Estaciones de Servicio; miembro del Petroleum Equipment Institute y del National Associaton of Convenience Stores (PEI/NACS) y Consultor en temas de Energía.

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