Inicio México Impredecible, básico, el rey primitivo… He aquí a Su Majestad Imperial: Silverio

Impredecible, básico, el rey primitivo… He aquí a Su Majestad Imperial: Silverio

No quiere parecerse a nada. No le gusta ir a conciertos ni escuchar música, tampoco trata de convencer a nadie para que lo escuchen; dice que prefiere mantenerse así: virgen.

Silverio, conocido como Su Majestad Imperial, no tiene trucos y regresó con otro disco homónimo enfocado al goce en vivo.

“‘Aborígenes’ es lo que todo el público va a ver», menciona, «esta es una canción en vivo que va a servir muy bien para la aniquilación total”.

Su Majestad Imperial tardó más de cinco años en sacar un larga duración; mientras eso ocurría, trabajó junto con Laura León, La Tesorito, una versión más salvaje de la canción ‘Suavecito’.

Prácticamente me dedico a robarme pequeños pedacitos y construir de esa manera las canciones. Voy robando fragmentos y de los diferentes lugares hago lo que termina siendo una canción.»

SilverioMúsico

En su música hay una constante: las oraciones simples y las frases cortadas por el frenesí de beats y sonidos que invitan al desmane kitsch en escena, mismo que lo ha llevado a girar por toda Europa, México, Argentina y parte de Centroamérica.

“Juego con las palabras, las uso como sampleos. Me da risa la situación y la frase ‘fuga de cerebros’ para explicar que la gente inteligente se va de este país”, explica Silverio, “prefiero trabajar las letras de esa manera: concisas y mínimas, más que contar una historia larga, compleja y aburrida. Creo que con tres palabras se puede decir mucho”.

Aunque a Silverio le gusta Elvis Presley por su calidad de montaje escénico, su personalidad y movimientos… lo demás son distracciones.

Los temas de Su Majestad Imperial no gozan de ninguna referencia ni inspiración y tampoco necesita ver cine, leer o recurrir a más música. Lo básico, los gemidos, lo primigenio y los ruidos de la urbe son los que se repiten hipnóticos una y otra vez.

“Tengo los oídos abiertos todo el tiempo para ver de dónde extraigo pequeños fragmentos con los que hago música. Silverio es ecologista y recicla”, asegura.

Todo es un instrumento para hacer cosas: desde el cencerro hasta lo que pueda decir una persona en la calle. Silverio no trabaja con la computadora al crear, pero tampoco aboga por lo análogo.

“No tiene razón de ser tener proyecciones, músicos, echarle paja a un espectáculo o a un disco. Mientras más simple, mejor”, detalla, “no es necesario tener más personas. ¿Para qué tener más gente si yo puedo hacerlo todo?»

Su trabajo se remite a una mezcla de todo. No se circunscribe a un género en específico. Llegar a un concierto de Silverio es como encontrarse en medio de una selva electrónica; entonces aparece, rodeado de primates, un hombre que se sienta en medio de su trono, vestido únicamente con un calzón rojo o como se escucha en su tema ‘Gorila’: «Es una onda reselvática».

Foto: Aldo Gutiérrez

De entre todo lo impredecible que rodea a Silverio quizá el único ritual inamovible en su espectáculo tiene que ver con su ropa interior; no hay concierto, ni siquiera en televisión o en el Cenart, en el que no termine vistiendo únicamente su característica tanga roja.

“El calzón rojo es un clásico; es algo que nunca va a cambiar. No hay trucos. Creo que quitarme la ropa está relacionado con eso. Lo que hay es lo que tengo y lo que van a ver.

“Ha sido bueno porque me funciona y la gente es bastante morbosa; les atrae la idea de la censura. (Entonces) hay que explotarlo de la mejor manera”, menciona Silverio.

El nuevo álbum, Silverio (2018), se compone de siete canciones inéditas, entre las que destacan ‘Aborígenes’, ‘Fuga’ (la cual ya cuenta con un videoclip) y ‘La Bestia’; además de haber colaborado junto con el ingeniero de audio Jerry Ordoñez, quien también trabajó en los discos Hasta la raíz (2015) de Natalia Lafourcade y Prográmaton (2013) de Zoé.