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La propagación del coronavirus preocupa a China, ante el inicio de las festividades del Año Nuevo

Un nuevo virus similar al Síndrome respiratorio agudo severo (SARS, por sus siglas en inglés), el cual se originado por el coronavirus, se formó en el centro de China y se está propagando de persona a persona; ha infectado a los trabajadores médicos, lo que aumenta la preocupación por el riesgo de una transmisión más amplia.

El número de casos en China se incrementó durante el fin de semana y las autoridades sanitarias de todo el mundo aumentaron las pruebas para detectar el virus, que incluye síntomas como fiebre y tos.

Con el Año Nuevo chino a solo unos días de distancia, una temporada de vacaciones durante la cual los ciudadanos de la nación acumulan 3 mil millones de viajes en todo el país para reunirse con la familia, la propagación del virus podría intensificarse.

Wuhan, la ciudad china donde arrancó el brote, ahora tiene casi 200 casos confirmados, incluidas cuatro muertes. También se reportaron infecciones en Beijing y la provincia de Guangdong, en el sur del país. En toda la región, Corea del Sur detectó su primer caso, que se sumó a los hallados en Tailandia y Japón la semana pasada.

El aumento de las incidencias, después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicara una guía para la detección de diagnóstico del virus el viernes, confirmó que el nuevo patógeno se transmite entre los humanos, y no solo de animales a humanos, como se esperaba originalmente.

La televisión estatal china CCTV, citando a Zhong Nanshan, investigador de la Comisión Nacional de Salud, también dio a conocer que se ha confirmado la transmisión de la enfermedad de persona a persona. Catorce profesionales médicos han sido afectados, según la televisora.

El SARS mató a casi 800 personas hace 17 años. Esta enfermedad también representaba un alto riesgo para los trabajadores de la salud.

Los países de todo el mundo intensificaron la evaluación de los viajeros entrantes antes de las vacaciones chinas que comienzan este viernes.

Los aeropuertos internacionales de Nueva York, Los Ángeles y San Francisco comenzaron a realizar evaluaciones desde la semana pasada, uniéndose a las ciudades de Asia que implementaron medidas de vigilancia días después de que se informara el brote el 31 de diciembre.

En Wuhan, los trabajadores de la salud realizaron estudios a 11 millones de personas, detectando síntomas entre individuos en aviones y estaciones de ferrocarril. Es posible que más de mil 700 personas en esa ciudad hayan sido infectadas con el virus, precisaron el viernes Neil Ferguson y sus colegas del Imperial College de Londres en un estudio.

Su análisis se basó en casos reportados fuera de China la semana pasada, con la suposición de que toma cinco o seis días para que alguien se sienta mal después de ser infectado, y otros cuatro o cinco días para detectar la infección.

Las acciones de las compañías en los sectores de viajes y hoteles cayeron por temor a un golpe al turismo durante el Año Nuevo chino tradicionalmente un periodo pico de gasto para la fuerza de consumo de miles de millones de dólares de China.

Las aerolíneas chinas y los operadores de casinos de Macao estuvieron entre los mayores ‘perdedores el lunes’, con Air China hundiéndose hasta 7.8 por ciento en Hong Kong.

El nuevo coronavirus, conocido como 2019-nCoV, activó la alarma debido a las similitudes con el que provocó el SARS hace 17 años. Ese brote comenzó con infecciones esporádicas y se aceleró al pasar por los hospitales de Singapur antes de extenderse por todo el mundo, perjudicando a las empresas y las economías.

Los coronavirus son una gran familia de virus, algunos que causan enfermedades en las personas y otros que circulan entre los animales, incluidos los camellos, los gatos y los murciélagos, precisaron las autoridades sanitarias.

En algunos brotes raros, los coronavirus animales pueden evolucionar e infectar a las personas, y luego propagarse entre ellas.

La fuente y las rutas de transmisión del virus 2019-nCov aún se desconocen, aseguró el domingo la Comisión Nacional de Salud de China en un comunicado.

Según los informes, algunos del primer grupo de pacientes en Wuhan trabajaban o compraban en un mercado de mariscos donde también se vendían animales vivos y partes de vida silvestre .

Las autoridades provinciales de salud en Guangdong confirmaron un caso el domingo en un residente de Shenzhen de 66 años que desarrolló fiebre y fatiga el 3 de enero durante un viaje de cinco días a Wuhan.

Dos casos han sido confirmados en Beijing, según un comunicado de una autoridad de salud local este día. Los pacientes, que tienen un historial de viajes a Wuhan, han sido hospitalizados y se encuentran en condición estable.

Funcionarios en Tailandia reportaron dos casos la semana pasada, mientras que Japón confirmó un caso el jueves. Todos ellos vivían en Wuhan o habían pasado tiempo ahí, aunque ninguno estaba relacionado con el mercado de mariscos.

Las autoridades de salud destacaron que hasta las 22:00 horas del domingo, 25 de los 198 casos de la ciudad habían sido curados. Otros tres fueron dados de alta del hospital.

Actualmente, 170 casos están siendo tratados en salas de aislamiento en varios hospitales, de los cuales 126 casos son leves, 35 son graves y nueve casos están gravemente enfermos.

De los 136 pacientes nuevos reportados durante el fin de semana, 66 eran hombres y 70 mujeres; el más joven tenía 25 años y el mayor 89.

La enfermedad más reciente ocurrió antes del sábado, y los síntomas iniciales fueron principalmente fiebre, tos o opresión en el pecho y dificultad para respirar.

Las autoridades chinas puntualizaron que el brote «aún puede prevenirse y controlarse», en un intento de tranquilizar al público mientras cientos de millones de personas se preparan para viajar antes de las festividades anuales más grandes del país.