La Roma de Italia dio la gran sorpresa este martes al golear como local 3-0 al Barcelona y clasificar a las semifinales de la Liga de Campeones, gracias al gol que marcó como visitante en el partido de ida.
El equipo de la capital italiana había sido goleado 4-1 en el primer encuentro en Barcelona, por lo que las expectativas de que la Roma diera vuelta el marcador eran muy bajas, más si al frente tenía al Barsa liderado por el astro argentino Lionel Messi.
Sin embargo, Edin Džeko abrió el marcador a los 6 minutos tras controlar el balón entre Samuel Umtiti y Jordi Alba y vencer al arquero visitante Marc-André ter Stegen. La tempranera anotación le dio mayores bríos a los dirigidos por Eusebio Di Francesco.
A chi ci è stato a fianco, a chi l’ha vissuta da casa, a chi ha lottato sul campo, a chi ha pianto, a chi non smette di ridere, a chi dice che lo sapeva, a chi non ci crede e pensa che sia solo un sogno, a tutti quelli che vorreste abbracciare adesso: GRAZIE! #RomaBarca#ASRoma pic.twitter.com/uE6LzxqYlE
— AS Roma (@OfficialASRoma) 10 de abril de 2018
El Barça aparecía apagado por momentos en el Estadio Olímpico de Roma, que vio cómo en el reinicio del encuentro Gerard Piqué derribó en el área a Dzeko y el árbitro del encuentro cobró penal.
Daniele De Rossi cobró la pena máxima y dejó a los locales 2-0 arriba y con mucho tiempo por delante para poder lograr la hazaña.
Tras algunas claras posibilidades de anotar, fue el griego Kōnstantinos Manōlas el que se adelantó a todos en un tiro de esquina para cabecear el balón y convertir el 3-0 que a la postre fue el resultado final.
El marcador global de la serie fue 4-4, pero el gol de Dzeko en la ida resultó clave para que el equipo italiano avanzara a las semifinales del torneo.
El Liverpool derrotó 2-1 al Manchester City como visitante y avanzó a las semifinales de la Liga de Campeones con un marcador global 5-1, dejando en el camino a uno de los favoritos para quedarse con el torneo.
El City, del técnico español Pep Guardiola, se puso en ventaja a los 2 minutos de partido a través de Gabriel Jesús y pareció que podría conseguir el «milagro» de dar vuelta la serie tras caer 3-0 en la ida.
La primera parte fue completamente en favor de los locales, con presión en todo el campo que le valió claras jugadas para aumentar su ventaja, pero fue incapaz de vulnerar nuevamente el arco del Liverpool.
En la segunda parte, sin embargo, los visitantes dieron el golpe de nocaut al City en el minuto 56, cuando el egipcio Mohamed Salah anotó el gol del empate, lo que deprimió a los locales que luego perdieron el rumbo.
El brasileño Firmino sentenció la serie en favor de los dirigidos por el alemán Jürgen Klopp cuando a los 77 minutos remató cruzado con la pierna derecha y dejó sin opción al arquero local Ederson.
