La cancelación de la distribución de Parmalat en México por parte de Grupo Lala, luego de que ésta llegara a un acuerdo con Grupo Lactalis de concluir toda acción legal en Brasil, no tendrá un impacto relevante ya que el negocio de distribución de todas las marcas, apenas representa menos del cinco por ciento de los ingresos totales, señalaron analistas de Monex Grupo Financiero.
La empresa coahuilense anunció ayer que en 2017 concluyó la compra del 99.9 por ciento de las acciones de Vigor, en Brasil y el 50 por ciento de las acciones de Itambé, que pertenece a Vigor,
La transacción incluía la condicionante de que la Cooperativa Central dos Productores Rurais de Minas Gerais, ejecutará su derecho de preferencia para adquirir el 50 por ciento restante de Itambé.
En ese mismo año la Cooperativa ejerció dicho derecho y se anunció la venta del cien por ciento de las acciones de Itambé Alimentos a Grupo Lactalis.
Lala consideró que dicha venta se dio en condiciones contrarias a ciertos acuerdos entre Vigor y la Cooperativa, e inició acciones legales.
Al anunciar el acuerdo con Lactalis para dar por terminado en su totalidad los procedimientos judiciales y arbitrales, Lala señaló que en virtud de que Parmalat pertenece a Lactalis, finalizó la relación contractual que mantenía de distribución de productos de marca Parmalat en México.
“Consideramos que el reciente acontecimiento es neutral para la emisora ya que no hubo consecuencias importantes para Lala. Es importante mencionar que los ingresos por distribución de las diversas marcas con las que cuenta licencia Lala, entre ellos, Parmalat, representan menos del cinco por ciento de los ingresos totales, por lo que el efecto de la terminación contractual de productos de dicha marca, sería poco significativo”, explicó en un análisis Monex.
A su vez la firma productora de leche mexicana, mencionó que dicho acuerdo se apega a su estrategia de dar mayor enfoque a sus mercados clave, siendo Brasil uno de ellos.
