Los mercados financieros extendieron su racha negativa, ante mayores tensiones en el conflicto comercial entre Estados Unidos y China, que apunta a una ‘guerra fría’ tecnológica.
A esto se sumaron datos decepcionantes de la manufactura en Asia y Europa, que estarían validando el impacto de los conflictos comerciales a nivel global.
Ante esta coyuntura se presentó una ola vendedora que provocó caídas acentuadas en los índices bursátiles a nivel global, que llegó al mercado energético, donde el crudo de referencia, el WTI, se ubicó por debajo de los 60 dólares el barril, con una baja en el día de 5.7 por ciento, su peor jornada en el año.
En Estados Unidos, el índice Dow Jones perdió 1.11 por ciento, el S&P 500 retrocedió 1.19 por ciento, y el tecnológico Nasdaq cayó 1.58 por ciento. En México el indicador de referencia retrocedió 0.28 por ciento.
En el ámbito comercial, las sanciones y problemas corporativos continuaron escalando después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, evalúa añadir a cinco compañías chinas, los líderes mundiales en la videovigilancia, a la lista negra que ya incluye a Huawei.
En el país se está analizando agregar a empresas como Megvii, Zhejiang Dahua Technology, Hangzhou Hikvision Digital Technology, Meiya Pico e Iflytek, lo que de concretarse, las excluiría de los componentes o software estadounidenses, de acuerdo con una nota de Bloomberg.
Tim Culpan, columnista de Bloomberg, se refirió a esta disputa como el inicio de una ‘guerra fría’ tecnológica y recordó que un proceso similar tuvo lugar cuando a ZTE se le prohibió adquirir productos estadounidenses tras renegar de un acuerdo para dejar sin efecto cargos de infringir sanciones comerciales.
También destacó que Panasonic estaría considerando reducir sus negocios con Huawei; según estimaciones del banco de inversión Goldman Sachs, si China castiga a Apple como EU lo hizo con Huawei, la tecnológica podría perder un tercio de sus utilidades globales
De esta manera, el fuego cruzado de aranceles entre las dos más grandes potencias se está extendiendo a las empresas, cuyos efectos sobre las tecnológicas en China están regresando como un búmeran a las estadounidenses.
Particularmente, han sido golpeadas empresas del sector tecnológico estadounidense, como Qualcomm Inc e Intel Corp, entre otras
Además, existe la posibilidad de que el gobierno de EU pueda aplicar aranceles a las importaciones provenientes de China, con valor de alrededor o superior a los 300 mil millones de dólares
De cumplirse la amenaza, se estarían aplicando aranceles a todas las importaciones de China, algo que también sería correspondido, por la nación asiática.
El fuego cruzado de aranceles, ahora extendida a las sanciones a empresas tecnológicas, podría derivar en una guerra de divisas e, incluso, en la disminución en la tenencia de bonos estadounidense en poder de China
Por lo que las negociaciones encaminadas a lograr un acuerdo entre las dos más grandes potencias económicas del mundo dan señales de extenderse y de profundizarse, situación que puede seguir afectando negativamente a las expectativas para el crecimiento económico global y al comportamiento de los mercados financieros.
Los mercados resienten el conflicto
Ante estos hechos, los mercados descuentan una mayor desaceleración económica como consecuencia.
China ha dejado clara su posición y no tiene la intención de hacer concesiones a Estados Unidos para reanudar las conversaciones. El ministro de comercio de China, dijo que Estados Unidos escaló de manera unilateral las tensiones, y si quiere volver a la mesa de negociaciones tiene que corregir eso.
Esta ola vendedora en los mercados llegó al mercado energético que se apuntó su peor día en el año ante las preocupaciones de que la guerra comercial impacte la demanda.
El WTI en Nueva York cayó 5.71 por ciento, a los 57.91 dólares por barril. Mientras que el Brent en Londres se deslizó 4.44 por ciento, a los 67.83 dólares por barril.
En datos económicos, la consultora Markit reveló que la actividad manufacturera registró su menor expansión en nueve años. Situación que sugiere que la economía pudiera frenarse durante el segundo semestre del año.
A nivel accionario, las emisoras que retrocedieron fueron NetApp, que cayó 8.33 por ciento, le acompañaron Hess, Devon Energy y Noble Energy.
En sentido opuesto, las acciones que ganaron fueron L Brands, que se disparó 12.53 por ciento, le siguieron Copart, Kontoor Brands y Medtronic.
En México, los índices locales moderaron las caídas sobre la última hora, pero también apuntaron tropiezos por tercer día consecutivo ante la ola vendedora de activos de riesgo.
El Índice de Precios y Cotizaciones perdió 0.3 por ciento, con lo que se ubica en 42 mil 812 unidades. En tanto, el FTSE BIVA retrocedió 0.36 por ciento, a los 874 puntos.
En datos económicos, el Inegi reveló que la inflación registró una variación de 4.43 por ciento a tasa anual en la primera quincena de mayo presionado por los productos agropecuarios.
A nivel accionario, las emisoras que cayeron fueron Industrias Peñoles, que perdió 3.36 por ciento, le acompañaron Grupo Carso, Alpek y Mexichem.
En sentido opuesto, las emisoras que ganaron fueron Regional que avanzó 2.5 por ciento, Genomma Lab, Walmart de México y Grupo Aeroportuario del Pacífico.
