Inicio México México ve en TPP inspiración para TLCAN 2.0, pero no imitación

México ve en TPP inspiración para TLCAN 2.0, pero no imitación

Tanto el sector privado como el Gobierno de México ven en el Acuerdo Transpacífico (TPP) una fuente de inspiración para la próxima modernización del TLCAN; sin embargo, esto no implica que dicho acuerdo se vaya a replicar tal y cómo fue negociado.

Así lo hicieron saber el subsecretario de Comercio Exterior, Juan Carlos Baker, y el director general de la consultora en comercio IQOM, Sergio Gómez Lora, durante una conferencia organizada por el Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE) en el marco de la Expo Carga 2017.

Debido a que se busca reforzar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con temas actuales como el comercio digital, la propiedad intelectual y los derechos laborales, Baker consideró que se debe voltear a ver hacia los tratados más recientes que ya los incluyen.

«Sí, me parece natural que busquemos inspiración en aquellos acuerdos donde haya este tipo de temas, pero es muy importante dejar en claro que el TPP es una cuerdo que generó balances entre 12 países y por lo tanto no es correcto pensar que podemos agarrar textos de cualquier disciplina del TPP y hacer copy paste«, dijo Baker.

En este sentido, Gómez coincidió en que el TPP puede ser un punto de partida interesante para abordar en la mesa de negociación; sin embargo, precisó que se debe de tomar con las consideraciones propias del tratado.

El TPP se negoció con 12 países de América y Asia-Pacífico que conjunta a economías sumamente diversas como los gigantes Estados Unidos y Japón, así como naciones emergentes de Latinoamérica como Perú y Chile y hasta ciudades-estado de Oriente como Brunei.

NEGOCIACIONES ANTES DE ELECCIONES, APROBACIÓN NO

Y si bien Gómez ve posibilidades para terminar las negociaciones técnicas antes de las elecciones de verano 2018 en México y Estados Unidos, precisó que la parte de aprobación del tratado muy probablemente se dará luego del proceso electoral.

Este punto resulta crucial, ya que tanto México como Washington han manifestado la necesidad de terminar las negociaciones del TLCAN 2.0 antes de que se celebren elecciones presidenciales en México y legislativas en EU para evitar la incertidumbre que se genere por las campañas electorales.

Por ello, Gómez divide el proceso de renegociación en dos partes: la primera serán las negociaciones técnicas del tratado que podrán empezar el 16 de agosto, y la segunda el proceso de aprobación legislativa en cada país, en particular el de EU.

«Yo veo muy complicado que antes de que culminen los procesos electorales se cierre el ciclo completo de negociación más aprobación (en los tres países); sin embargo, sí veo posible que, por lo menos, técnicamente haya un arreglo de los ejecutivos antes que estos procesos de elección arranquen», añadió Gómez.  

Sobre el futuro de las negociaciones, el representante del Partido Republicano en México, Larry Rubin, aseguró, durante su participación, que al final del día, los políticos en EU buscarán un TLCAN moderno que se fortalezca.

FORTALECER ECONOMÍA INTERNA 

En el entorno doméstico «México no llega bien parado a la mesa de negociación pues enfrenta una creciente deuda, desempleo e inversión», de acuerdo con Luis Foncerrada, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

«Desgraciadamente no llegamos a esta negociación con una gran fortaleza interna. La parte fiscal ha sufrido un fuerte deterioro los últimos cuatro años», dijo Foncerrada.

En este sentido explicó que el saldo histórico de la deuda pública se ha elevado 60 por ciento en los últimos años, que al final del año pasara a entre 65 y 70 por ciento y al final del 2018 será superior al 70 por ciento.