El precio del petróleo repuntaron al final de la jornada hasta un 2 por ciento, después que Arabia Saudita anunciara que se prepara para reducir los envíos a las refinerías de Estados Unidos en cuestión de semanas, en un esfuerzo por evitar la acumulación de precios de las reservas estadounidenses.
Los futuros del crudo Brent para entrega en febrero subieron al cierre 2.16 por ciento, a 61.45 dólares por barril que cotiza en el mercado ICE de futuros de Londres.
En la Bolsa Mercantil de Nueva York, el contrato del crudo WTI para enero mostró una ganancia de 2.8 por ciento, para terminar en 52.58 dólares.
La compañía petrolera controlada por el estado saudí advirtió a las refinerías estadounidenses que se preparen para una fuerte caída en los cargamentos el próximo mes, según personas informadas sobre los planes de Saudi Aramco.
Los precios también fueron respaldados por un informe que dijo que Genscape observó una gran caída en las reservas en el mayor centro de almacenamiento de Estados Unidos en Oklahoma, así como una advertencia de la AIE de que los suministros globales pueden estar en mayor peligro de lo que se pensaba anteriormente.
Se ha dicho a los refinadores estadounidenses que esperen envíos mucho más bajos de Arabia Saudita en enero en comparación con los últimos meses posteriores al acuerdo de la OPEP de la semana pasada para reducir la producción, según la fuente.
La producción estadounidense récord, que se espera que aumente a más de 12 millones de barriles por día en 2019, amenaza con abrumar al mercado. Estados Unidos también ha permitido a algunas naciones comprar temporalmente petróleo iraní a pesar de la implementación de sanciones, mientras que la unidad de la Organización de Países Exportadores de Petróleo está en riesgo.
Los inventarios de crudo de Estados Unidos cayeron en 1.21 millones de barriles la semana pasada, según mostraron los datos de la Administración de Información de Energía el miércoles. Esa es una disminución mucho menor que los 10.2 millones de barriles citados en un informe de la industria el martes.
Si bien los inventarios de crudo de Estados Unidos disminuyeron por segunda semana a alrededor de 442 millones de barriles, aún están por encima del promedio de cinco años de 410 millones de barriles, según datos compilados por Bloomberg.
Las existencias en el centro de almacenamiento de la nación de Cushing, Oklahoma, aumentaron por tercera semana hasta el nivel más alto desde enero, según los datos de la EIA.
Otro factor fue el anuncio de la Agencia Internacional de Energía (AIE) que dijo que las pérdidas de producción combinadas de Irán y Venezuela podrían alcanzar los 900 mil barriles por día durante el segundo trimestre del próximo año, más del doble de los 800 mil barriles que la OPEP planea retirar de los mercados mundiales.
Con información de Reuters y Bloomberg.
