Las acciones europeas se hundieron este miércoles a mínimos en 2 semanas , tras el derrumbe del 3 por ciento en Wall Street el martes, en una jornada que prevaleció el nerviosismo porque los mercados de bonos de Estados Unidos indican una recesión inminente y una guerra comercial entre las dos principales economías del mundo.
La confusión aumentaba en torno a lo acordado por los presidentes de Estados Unidos y China en la pasada cumbre de los países del G-20 en Buenos Aires, Argentina.
Tampoco ayudó a los mercados la situación del Brexit, tras los duros reveses sufridos por la primera ministra británica, Theresa May, en el inicio de un debate de cinco días sobre sus planes para abandonar la Unión Europea que podría determinar el futuro del Brexit y el de su Gobierno.
En este contexto, el índice Stoxx Europe 600, cerró con una caída de 1.16 por ciento, un mínimo desde el 23 de noviembre. En tanto que el índice DAX-40 de la bolsa de Frankfurt cayó 1.19 por ciento, seguida de la bolsa de Londres que perdió 1.44 por ciento y el CAC-40 retrocedió 1.36 por ciento.
Por su parte, el índice SMI de Suiza perdió 1.62 por ciento, mientras que la bolsa de Madrid cedió un 0.55 por ciento; el PSI de Lisboa cerró en baja de un 0.31 por ciento y el Mibtel de Milán opera con una marginal alza de 0.35 por ciento.
Los mercados caían tras el desplome de Wall Street, al seguir dudando los inversores de la aparente tregua comercial pactada esta semana entre Estados Unidos y China y entre crecientes temores sobre la economía global.
Las ventas volvían a sucederse en las bolsas europeas a pesar de que China trataba de templar los ánimos diciendo que seguirá con sus negociaciones comerciales con Estados Unidos en los próximos 90 días con la confianza de poder alcanzar un acuerdo.
El frenazo económico en Estados Unidos ha provocado que el bono del Tesoro a tres años ya pague más que el de cinco años, la primera vez que se da esta situación desde 2007.
Sobre los mercados pesaba también la incertidumbre sobre la aprobación del acuerdo del Brexit por el parlamento británico, que votará el próximo día 11, y la rebaja de la previsión de déficit presupuestario que Italia va a presentar a la Unión Europea.
Como telón de fondo, la incertidumbre y escepticismo sobre la tregua alcanzada el fin de semana entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homógo chino, Xi Jinping, que solo ha durado solo unas horas.
Los inversores tienen dudas muy razonables sobre el alcance del acuerdo anunciado el fin de semana entre China y Estados Unidos y, vistas las primeras reacciones de los funcionarios estadounidenses, temen que el pacto no sea más que una declaración de buenas intenciones.
En el mercado de divisas, el euro subía marginalmente frente al dólar en un 0.05 por ciento y se intercambia a 1.1349 billetes verdes.
El dólar estadounidense se desplomó al caer los rendimientos del Tesoro, lo que se suma a las preocupaciones de que la Reserva Federal podría detener su ciclo de alza de tasas.
El dólar, que comenzó la semana en una posición débil porque el aparente deshielo de las tensiones comerciales enfrió la demanda de la moneda para refugio, extendió su caída debido a que los inversores estaban preocupados por la inversión de la curva de rendimiento en los mercados de bonos.
Con información de Reuters, Notimex y Bloomberg.
