El sector energético se enfrenta ante uno de los principales retos que ha vivido en México, y es saber qué quiere hacer el Gobierno, que encabeza Andrés Manuel López Obrador con las reformas Energética, eléctrica y el gas natural, dijo César Cadena Cadena, presidente del Clúster Energético de Nuevo León.
Señaló que además el que no esté muy claro cómo va a lograr las metas que se han planteado como por ejemplo en la producción de petróleo, si el 60 por ciento de las reservas que tiene el país sólo pueden ser extraídas mediante el uso del fracking.
“Tenemos tres retos, primero tenemos que saber qué quiere hacer el Gobierno con la Reforma Energética, Eléctrica y con el asunto del gas. El asunto del gas es bastante preocupante, sin fracking no hay gas. Nosotros tenemos que copiar los modelos exitosos de negocio puede ser el de Venezuela o el de Estados Unidos.
Los gringos se van de 300 mil barriles diarios a casi 12 millones de barriles haciendo fracking. Podemos satanizarlo, pero el 60% de las reservas en México está en fracking, no hay técnica alternativa”, explicó.
El también presidente de Grupo Energéticos (Energex) cuestionó “¿cómo le van a hacer para sacarlo?, ya vimos que los privados no aportan. La cifra oficial de la Sener es que los privados sólo están aportando cuatro mil barriles diarios y ya llevan cuatro años trabajando”.
Cadena Cadena presumió que la baja producción de éstos “y es mi interpretación, es que la licitación se la ganaron los políticos con la intención de revenderla o hacer negocio”.
Por otro lado mencionó que en el tema eléctrico éste sería el sector más afectado de todos, “porque aparentemente las seis empresas que eran de CFE las están echando para atrás para volverlas a juntar otra vez”, aunado a que aún no está claras “las reglas de juego”.
Explicó que las inversiones se hicieron tomando como referencia las bases de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), sin embargo éstas no tienen certidumbre si el proyecto seguirá siendo rentable o no ante un potencial “cambio en las reglas”.
Consideró como positivo el querer reducir la importación de energéticos de Estados Unidos al querer echar a andar las refinerías y construir una nueva, “eso se va a ver en unos 2 o 3 años. Pero en el caso del gas, donde ya importamos el 60 por ciento, si queremos conectar más ductos vamos a tener más dependencia y cada día Pemex produce menos gas, como con qué se va a sustituir eso” puntualizó.
