La inflación en la industria de la construcción alcanzó el 10.3 por ciento durante 2018, su nivel más alto de los últimos 10 años, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Centro de Estudios Económicos del Sector de la Construcción (Ceesco) señaló este lunes que la alta inflación del sector fue reflejo del encarecimiento de los materiales de la construcción, que tuvieron un incremento de 11.3 por ciento en 2018, el más alto para un año desde 2009.
Refirió que las imposiciones arancelarias al acero y aluminio elevaron entre 3 y 4 por ciento el índice general de los precios para la industria de la construcción, ya que los materiales de acero son el principal insumo utilizado en la obras de construcción (varilla, alambre, alambrón, tubos, perfiles y mallas de acero, entre otros), al representar entre 12 y 18 por ciento en promedio de los insumos utilizados en una obra.
Asimismo, los productos derivados del petróleo también influyeron en el crecimiento de los precios.
Los materiales que presionaron al alza los costos de los constructores fueron el asfalto con 68 por ciento, seguido de la varilla 29 por ciento, alambre y alambrón con 27 por ciento, castillos armados 21 por ciento, la gasolina y diésel 19 por ciento, respectivamente.
Además, el aumento en los costos de los materiales de la construcción fue un factor que limitó el desempeño de la actividad productiva de la industria de la construcción el año pasado, al encarecer y retrasar el calendario de conclusión de diversas obras, lo que estancó a la industria a un crecimiento de 1.6 por ciento en 2018.
El Ceesco estimó que si no se tiene éxito en la cancelación arancelaria, las presiones a los precios de la construcción continuarán durante 2019.
“En las actuales circunstancias, esperamos un escenario en el que el nivel general de precios para la construcción se ubique en un rango de entre 8 a 9 por ciento en 2019”, apuntó.
Del mismo modo, instó a resolver la problemática del abastecimiento de combustibles, ya que de prolongarse afectaría negativamente el desempeño de la industria de la construcción.
