Los empresarios que cuenten con un promedio anual de 300 o más trabajadores en el ejercicio fiscal inmediato anterior están obligados a dictaminar el cumplimiento de sus obligaciones ante el IMSS, señalaron especialistas del Instituto de Contadores Públicos de Nuevo León (ICPNL).
“El instituto (IMSS) cuenta con cinco años de caducidad para objetar el dictamen, y en ocasiones, se sustenta en él para reclasificar a la empresa, por ello debe tenerse especial cuidado al describir la clase y fracción declarada originalmente, y evitar discrepancias posteriores”, dijo Francisco González, consultor independiente.
El ICPNL, que preside Miguel Ángel Cantú, llevó a cabo su evento “Aspectos Jurídicos Primordiales Ley IMSS” con el objetivo de proporcionar a las áreas administrativas y de recursos humanos, los elementos y prevenciones de control legal e implicaciones jurídicas, que permitan a la función de seguridad social, la disminución de riesgos legales y pasivos fiscales contingentes.
González Leal destacó que los patrones que no se encuentren en el supuesto anterior podrán optar por dictaminar sus aportaciones al Seguro Social, por contador público autorizado, en términos del reglamento.
