CIUDAD DEL CARMEN, Campeche.- Ante la intención de Petróleos Mexicano (Pemex) de cerrar 41 mil 600 plazas laborales en este año, la Unión Nacional de Trabajadores y Profesionistas Petroleros (UNTyPP), recurrió a IndustriALL Global Unión para solicitar su apoyo sobre las condiciones precarias en que se encuentran la planta laboral de la paraestatal.
El secretario general de UNTyPP, Pablo López Figueroa, destacó que el tribunal internacional recomendó a Pemex entablar diálogo con el sindicato para dar a conocer el proceso de reestructuración de la empresa petrolera de México.
También recordó a Pemex que las buenas relaciones industriales requieren que las empresas se apeguen a normas internacionales sobre reducción de personal, convenios y recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), apuntó.
La decisión de acudir a organismos fuera del país, explicó, deriva de la preocupación que se tiene por el desmantelamiento de la paraestatal, que impactará en la reducción del 27 por ciento la base trabajadora, situación que viola la Ley Federal del Trabajo e importantes convenios internacionales.
Por ello, subrayó, el sindicato denunció ante tribunales internacionales las malas condiciones en que se encuentran los obreros y de la forma cruel en que se está recortando al personal.
Además, en este caso hay pasividad por parte de las autoridades laborales, aunque el tema de los trabajadores petroleros sea preocupante, pues el recorte de personal es parte del resultado de la reforma energética, que se da drásticamente y violando leyes y tratados internacionales, asentó.
El líder sindical señaló que los directivos de Pemex rehúsan al diálogo con la UNTyPP, que está legalmente constituida y que representa a técnicos y profesionistas petroleros al margen del contrato colectivo armado entre la empresa y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), que encabeza en México Carlos Romero Deschamps, asentó.
López Figueroa destacó que se denunció ante IndustriALL Global Unión, organismo que representa los intereses colectivos de 50 millones de trabajadores y trabajadoras del sector minero, energético e industrial de más de 700 sindicatos en 140 países.
