El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) desechó el proyecto del magistrado José Luis Vargas Valdez que buscaba anular el resultado de las elecciones para gobernador del primero de julio, por lo que ratificó a Martha Erika Alonso como gobernadora electa del estado de Puebla.
Con cuatro votos en contra y tres a favor, el Tribunal rechazó este sábado dicha propuesta, a pesar de que reconoció la presencia de varias anomalías en los pasados comicios locales.
Tras horas de ‘jaloneo’ en una reunión a puerta cerrada de los magistrados, cuyo voto se anticipaba mayoritario a favor del proyecto, la sesión del tribunal se fue retrasando por horas.
Al final, se dio un vuelco en los pronósticos y se consideró que las anomalías que se encontraron no fueron suficientes ni determinantes en el resultado final de los comicios por lo que se decidió que no había motivos suficientes para repetir el proceso.
El magistrado José Luis Vargas se quejó de actos de intimidación a él y a otros magistrados por el sentido de su proyecto que presentó posterior a lo cual asentó que las irregularidades por las que se propuso echar abajo el resultado electoral se atribuyó directamente a los integrantes del Organismo Público Local Electoral que en Puebla encabeza Jacinto Herrera, al considerar que vulneró la garantía de audiencia de los partidos políticos al ingresar a la bodega central al menos 50 veces en 53 días, sin avisar previamente a los representantes partidistas.
Destacó que se rompió la cadena de custodia del material electoral, presentando videos en los que se muestra el ingreso en la bodega electoral en donde se tenía el material resguardado, por parte de más personas de las reportadas en la bitácoras y sin una justificación de por medio.
Además, el órgano electoral sólo proporcionó videos de 12 de los 53 días que tuvo en resguardo la documentación y paquetería electoral de los comicios de gobernador.
Amén de ello aseguró que la Violencia Generalizada al Interior de Casillas se acreditó en 51 casillas de las 116 señaladas en las demandas, en donde hubo robo, quema o destrucción de los materiales y documentos originales. En ocho casillas hubo disparos al aire y presencia de personas armadas.
También se acreditó, con las pruebas que aportaron los actores, que el presidente municipal de Cuetzalan del Progreso reconoció públicamente haber apoyado a la coalición «Por Puebla, Al Frente» con el traslado de documentación electoral lícita, dijo.
No obstante, dijo que no se encontró responsabilidad en las anomalías por parte de Martha Erika Alonso, lo cual fue secundado por el resto de magistrados.
La contraparte
Aunque el proyecto tuvo el respaldo del proponente y de Felipe Alfredo Fuentes Barrera, así como de Mónica Aralí Soto, fue rechazado por Reyes Rodríguez Mondragón, Indalfer Infante González, Felipe de la Mata Pizaña y la presidenta Janine Otálora Malassis, quienes consideraron que no hay pruebas que demuestren que los funcionarios del órgano electoral local que entraron y salieron de la bodega del Instituto hayan manipulado los votos de la elección de gobernador, máxime que no hubo variaciones graves en todos los ejercicios de conteos de votos, incluyendo los ciudadanos y los hechos por el propio TEPJF.
Asimismo se consideró que las pruebas presentadas por Morena para anular la elección de Puebla fueron extemporáneas.
Ante los hechos gente de Morena expresó su molestia a través de sus redes sociales, acusando a los magistrados de venderse al morenovallismo y de hecho el presidente de la Mesa Directiva del Congreso local, José Juan Espinosa advirtió “La mayoría de Diputados en el Congreso de Puebla no permitiríamos la sobrevivencia de un régimen monárquico como el que sufrimos en Puebla Por eso anunciamos al Tribunal Electoral que si ellos no defienden la democracia, lo haremos nosotros solicitando la desaparición de poderes”.
