A pesar de los problemas que tuvo y los que tiene, el Grupo Volkswagen mantiene su cetro como el primer fabricante de coches del mundo. Su posición en los principales mercados del mundo es dominante, aunque todavía hay regiones que se le resisten. América del Norte, con Estados Unidos a la cabeza, no termina de aceptar sus productos. Y la prueba está en que modelos vitales en otras regiones se están replegando para no dañarles más.
El Volkswagen Passat, junto con el Golf, es uno de los que mayores apuros está pasando. A diferencia de lo que muchos podrían pensar, este modelo nada tiene que ver con el que vemos en Europa o China. El único punto que tienen en común es que se encuadran en uno de los segmentos más denostados en la actualidad: son una berlina. Por ello, y debido al auge que los SUV´s están teniendo, su viabilidad está cada vez más en el aire.
El Volkswagen Passat abandonará Chattanooga en 2023
La actual generación del Volkswagen Passat para Estados Unidos está sufriendo para llegar al público. Sus ventas cada vez son más exiguas y, aunque fue puesto a punto a inicios de año, la situación no ha mejorado como la marca quería. Por tanto, los responsables de la división americana del Grupo Volkswagen han tomado una drástica decisión. Abandonará el mercado cuando la presente entrega haya agotado al máximo su ciclo comercial.
Según varias fuentes, entre las que está Wards Auto, esta «defunción» tendrá lugar a finales del próximo año 2023. Y vendría reforzado por las declaraciones de Ralf Brandstätter, ejecutivo de la firma para América del Norte. Al parecer, la marca ha entendido que EEUU es un mercado que apuesta firmemente por los SUV´s, pick up´s y todo terreno, por lo que una berlina clásica como lo es el Passat no tiene sentido en su portfolio.
Artículo relacionado:
Estados Unidos ya disfruta del nuevo Volkswagen Atlas Cross Sport
Y os preguntaréis ¿Qué modelo tomará su testigo? Pues vayamos por partes. El Jetta es más pequeño y su nivel de popularidad es tal que no se atreverán a modificar su posicionamiento para no hundirlo. Por tanto, la solución está en el lanzamiento de un nuevo SUV, bien sea eléctrico o convencional, que como el Atlas satisfaga las necesidades de esta región. Lo que si está claro es qué sucederá con la fábrica que se encarga de su manufactura.
El centro de Chattanooga (Tenessee) recibirá una fuerte inversión para ensamblar modelos eléctricos. Si las fuentes no están equivocadas, serán 80 millones de dólares los que llegarán para fabricar el esperado ID.4. Junto a él también habrá hueco para los Atlas y Atlas Cross, aunque por ahora ambos modelos no se han sumado a la electrificación. Habrá que ver si esta «baja» no afecta al Passat europeo y por ahora se mantiene en la gama.
Fuente – Wards Auto
