Mercedes, la marca de coches más espartana

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miércoles, 28 de junio de 2017

¿Qué puede hacer Mercedes-Benz patrocinando la Spartan Race? Cabría preguntarse de un evento cuyos participantes parece que van corriendo, en bici o nadando a cualquier sitio al que quieran ir. Sin embargo, lo cierto es que todas las marcas de coches buscan sin parar nuevos eventos y maneras de llegar a un público distinto. Y quizá todavía más esta por el hecho haber experimentado un cambio tan fuerte en los últimos años que, como me ha confesado más de un conocido “antes para hacían coches para señores mayores y ahora planteo comprarme uno algún día”.

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Además, en este caso el fenómeno también puede justificarse por disponer Mercedes de hasta siete modelos dentro de su gama SUV, que parece se prestan un poco más a las actividades ‘espartanas’. Si no sabes qué es la Spartan Race pero te acuerdas del fenómeno que se vivió hace unos años al abrigo de la película ‘300’, te digo que sí, parcialmente se inspira en algunas de las tradiciones y costumbres que hicieron míticas las cualidades de aquella ciudad-estado de la Grecia clásica. Tras mi participación en la Spartan Race de Bilbao, te aseguro que aquí puedes vivir una experiencia de compañerismo que si no has estado en el ejército o interno en un colegio difícilmente hayas podido conocer.

Con una diferencia, desde que pasas por la línea de salida, tus compañeros no son quienes se sientan contigo o tus amigos, son todos los demás. Si además te estás preguntando si tú podrías salir airoso de una Spartan, te diré antes de seguir que sí, si quieres, puedes. Eso para empezar, y para seguir que hay dos tipos de recorrido -al menos en la Spartan Race de Bilbao-: 5 km con 23 obstáculos o 12 km con 26 obstáculos. La dureza, eso sí, la pone más cómo tú te plantees la prueba que la propia distancia y, en el caso de la carrera vizcaína de este año, el factor barro, ya que el monte de Artxanda donde se celebró se había convertido en un lodazal por culpa de la lluvia incesante y por el paso de los más de 3.000 participantes en esta prueba.

Esto hizo que fuera imposible correr cuesta arriba o cuesta abajo, salvo para algunos participantes que decidían jugarse un golpe o lesión y arrastrar con ellos a alguno más. Por lo menos, esto a lo mejor también posibilitó llegar algo más frescos a algunos obstáculos. Sobre las pruebas de la Spartan Race, aunque hay alguna como tiro con jabalina, quizá recuerden más a un entrenamiento de un cuerpo de élite de cualquier ejército que a lo que hacían los espartanos para prepararse a morir desde niños. Coreanos bajo alambre de espino, monkeys, cuerda, paredes, escalada, más paredes, cargar sacos y troncos montaña arriba y montaña abajo, arrastrar neumáticos de camión… hasta había que pasar por debajo de dos GLE y un GLA.

Todo lo tienes que hacer si quieres poder completar una Spartan Race y, si no puedes con alguna a pesar de que los demás de te pueden ayudar, pues a hacer 30 burpees. Si no estás familiarizado con este ejercicio, es tumbarte boca abajo de golpe, para subir con fondo y luego doblar rodillas, saltar y terminar con palmada arriba antes de volver a empezar. Tengo 41 años, llevo toda la vida haciendo un mínimo de 6 horas semanales de deporte y los burpees no me asustaban antes de ir a la Spartan. Ahora que sé que, después de los esfuerzos que la prueba exige, hacer uno solo es como si te arrancaran una muela sin anestesia, los voy a entrenar un poco para la próxima vez.

Sí, habrá próxima, porque aunque mientras escribo esto todavía estoy recuperando partes olvidadas de mi cuerpo de los brazos de las agujetas, me lo pasé genial. Por cierto, participé en el equipo de los empleados de la planta de Mercedes en Vitoria y ‘quedamos’ cuartos en la general de equipos en Sprint – 5km- gracias al esfuerzo de Eder Montero, Asier Hurtado, Javier González, David Ocejo, Iker Ortiz y mucha más gente majísima a la que espero saludar de nuevo en la Spartan Race de Andorra -23 km para los que me empecé a preparar ayer- o si algún día vuelvo a visitar la planta. Confirmado: Mercedes-Benz es espartana y servidor, desde ahora, también.

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