Nos encantan las pantallas imposibles, y esta lo es. Sharp ha presentado su nueva 8M-B120C, un monstruo de 120 pulgadas de diagonal que presume de una serie de prestaciones que probablemente son tan exageradas como un precio que Sharp ha preferido no desvelar de momento.
No estamos ante una televisión gigante al uso, sino ante un monitor con unas características excepcionales. El fabricante la dirige a aplicaciones comerciales, pero seguro que alguno sueña con contar algún día con un monitor de este tipo, sobre todo ahora que tarjetas gráficas igualmente monstruosas –como la RTX 3090– pueden mover juegos sin problemas en él.
Preparada para la nueva generación de consolas
Estamos ante un monitor de la nueva generación de pantallas ultra-grandes de Sharp. La resolución 8K es tan solo la primera de las especificaciones notables de un panel con 2.048 zonas de atenuación independientes y que además cuenta con una entrada HDMI 2.1 que permite aprovechar todas sus virtudes y que la destina por ejemplo a ser usada con una Xbox Series X o una PS5 con ese conector.
Este monitor usa un panel LCD UV2A II de 120 pulgadas con una resolución de 7.680 x 4.320 píxeles, un brillo de 600 nits (en modo HDR el brillo máximo puede subir notablemente), un contraste 3500:1 y un tiempo de respuesta GtG (Gray-to-Gray) de 6 ms.
Aunque el tiempo de respuesta es algo alto para sesiones de gaming, los responsables de Sharp compensan eso con otro elemento importante para esas sesiones: el soporte de tasas de refresco de hasta 120 Hz (solo para contenido 4K, eso sí) y ángulos de visión de 176°.
Según Sharp este monitor es capaz de cubrir «una proporción significativa» del gamut ITU-R BT.2020, y soporta tecnologías HDR como HLG. Aunque la pantalla no es una televisión como tal, soporta la tecnología que hace upscaling de contenido que ya existe en su familia Aquos 8K.
En el apartado del sonido contamos con cuatro altavoces de 10 W y 2 altavoces de 15 W, y contamos con conectores analógicos y óptico de audio y soporte de sonido Dolby. Sus dimensiones son enormes (2.717 x 805 x 1.979 mm), pero también lo es su peso, de nada menos que 206 kg con el soporte integrado.
La Sharp 8M-B120C comenzará a comercializarse a finales de septiembre, pero Sharp no ha comunicado aún el precio de una pantalla que sin duda será tan exagerado como sus prestaciones.
Vía | Tom’s Hardware
