Inicio Salud Los casos de sarampión se multiplican por 15 en Europa desde 2016

Los casos de sarampión se multiplican por 15 en Europa desde 2016

Puntos rojos que se multiplican. Los signos clínicos del sarampión son los mismos que uno ve en un mapa del viejo continente cuando el Centro de Enfermedades Europeo marca los países que cuentan con más casos de la enfermedad infecciosa. Los datos empiezan a tomarse en serio, “ya que desde 2016 se han multiplicado por 15 los casos en Europa de sarampión”, advierte Antoni Trilla, responsable del Departamento de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Clínic de Barcelona.

Con motivo de la Semana Mundial de la Inmunización 2019, promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), merece la pena recordar que hay que “recuperar la confianza en las vacunas. Recordar que la inoculación contra el sarampión ofrece un 97% de protección. Además, hay que mantener la vigilancia epidemiológica a nivel global para el control de las enfermedades infecciosas”, añade Trilla.

La situación que vive Europa y EE UU, donde los casos de sarampión han obligado a decretar el estado de emergencia en Nueva York, contrasta con lo que “en países en vías de desarrollo desean conseguir, altas tasas de vacunación, como un logro social. Mientras en Occidente, debido a múltiples factores vivimos momentos de desadherencias”, concluye Amós García-Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV).

Entre los motivos, que argumenta García-Rojas, “hay que distinguir varios, porque es multifactorial. Tenemos casos en los que la culpa es la situación de pobreza, la crisis en países como Rumanía; la existencia de bolsas de población trashumante por su no acceso al sistema sanitario; la decisión de padres y madres, no es un colectivo homogéneo y hay factores diferentes en cada caso, hay dudas que les surgen”.

Por otro lado, los expertos apuntan que el propio éxito de las vacunas, que ha erradicado enfermedades terribles como la polio o la viruela y sus secuelas, “es un acto de fe en el que uno se protege contra una patología que no existe. Porque hay que explicar e insistir que gracias a la inoculación es que no existen estas dolencias y los virus están controlados”, subraya el presidente de la AEV.