«Este momento no es de análisis política.
Es el momento de aguardar el resultado de las urnas.
Quien habla es el pueblo, es quien decide el destino de la nación.
Elección es en dos vueltas.
Estamos acompañando para llegar a la segunda vuelta», dijo Alckmin tras depositar su voto en un colegio en la capital paulista.
Según las dos últimas encuestas divulgadas ayer sábado, el exgobernador de Sao Paulo obtendría un 7 % de los apoyos, por detrás del laborista Ciro Gomes (11-13 %) y muy lejos de los máximos favoritos para una eventual segunda vuelta, el progresista Fernando Haddad (22 %) y el ultraderechista Jair Bolsonaro (36 %).
De confirmarse estos resultados, sería la primera vez desde 1989 que el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), cuyo abanderado es Alckmin, se quedaría por fuera de la segunda vuelta.
Ese año disputaron la Presidencia Fernando Collor (1990-1992) y Luiz Inácio Lula da Silva, que gobernó Brasil entre 2003 y 2010 y hoy está preso y condenado por corrupción.
Desde entonces siempre hubo un candidato del PSDB en la segunda vuelta: Fernando Henrique Cardoso, que gobernó el país suramericano entre 1995 y 2002, José Serra, el propio Alckmin y Aécio Neves.
Sin embargo, Alckmin, que consiguió conformar una poderosa coalición con una decena de partidos de centro para estos comicios, manifestó hoy que la expectativa «es muy buena» y que ahora van a «esperar el resultado».
«Hoy es un gran día, el día mayor de la democracia.
No hay poder legítimo que no sea a través de la liberad y la democracia», indicó.
«Reafirmar aquí nuestra fe en Brasil, este país maravilloso.
La esperanza es que el país reencuentre su gran destino y confianza en las urnas», completó.
Alckmin depositó su voto acompañado por el exalcalde de Sao Paulo, el empresario Joao Doria, quien es a su vez candidato a la Gobernación de Sao Paulo y aparece como líder de los sondeos.
EFE/ FR
